Elecciones 20D: Las soluciones de cada partido a los grandes problemas económicos de España

Los responsables económicos de los partidos que tendrán más representación en el Parlamento según los últimos sondeos han presentado en Madrid las medidas que pondrían en marcha si llegaran a gobernar. La creación de empleo de calidad, la sostenibilidad de las pensiones y el sistema fiscal han sido las tres grandes temáticas del debate y éstas son sus propuestas:

Empleo, entre el contrato único, el Estado y las tarifas planas

El paro sigue siendo una de los principales lastres de la economía española. Las últimas cifras oficiales recuerdan que todavía hay 4,14 millones de personas sin empleo y, por ello, las formaciones políticas han situado a la creación de puestos de trabajo como uno de sus objetivos prioritarios. Todos comparten el diagnóstico, aunque sus recetas para combatirlo son muy diferentes:

PP. La ampliación de la tarifa plana de los contratos es la medida estrella que propone el partido del Gobierno. Su promesa es que las empresas estén exentas de pagar los primeros 500 euros de cotización de los nuevos contratos fijos y también de los temporales que se conviertan en indefinidos. La bonificación se mantendrá durante cuatro años y se extenderá a los propios trabajadores. “Tenemos que romper el miedo de las empresas a contratar de forma permanente y, por eso, proponemos que paguen menos contingencias comunes por un contrato fijo que por uno temporal al uso”, ha explicado Álvaro Nadal, director de la Oficina Económica del presidente del Gobierno.

Ciudadanos. La formación naranja tiene varias ideas en mente para crear empleo y ninguna se parece a la del PP. Lo que promete Ciudadanos es impulsar el contrato único (para romper la dualidad entre indefinidos y temporales), establecer un complemento salarial para todos aquellos que tengan empleos precarios o salarios bajos, cambiar las políticas de empleo para reintegrar en el mercado laboral a los parados de larga duración y dar cheques a los desempleados con menos recursos. También quiere fomentar los idiomas y la innovación para que empresas y trabajadores sean más productivos y competitivos.

Unidad Popular. El partido de Alberto Garzón quiere atajar el problema con un plan de choque basado en la creación de un millón de empleos dependientes del Estado con sueldos de entre 900 y 1.200 euros. Dicha maniobra estaría acompañada de otra que impulse la llegada de los jóvenes al mercado laboral, con subvenciones de hasta un 50% en las cotizaciones sociales. Ambas medidas, “estarían apoyadas y financiadas por el Estado (costarían unos 9.400 millones de euros netos)”, ha asegurado Sol Sánchez, número dos de la candidatura de la formación.

A medio plazo también quiere reformar el Estatuto de los Trabajadores y reforzar la contratación indefinida reduciendo los periodos máximos de los contratos en prácticas o aumentar la vigilancia de los de obra y servicio, por lo que rechaza tanto la tarifa plana del PP como el complemento salarial de Ciudadanos. También prevé derogar la reforma laboral actual y la que puso en marcha el PSOE en 2010.

Podemos. El partido liderado por Pablo Iglesias, al igual que Unidad Popular, tampoco confía en las propuestas de dichos partidos para conseguir crear empleo de calidad. Su idea es convertir en indefinidos los contratos temporales y de obra y servicio de más de un año, para lo que se apoyaría en Inspección. También quiere elevar el Salario Mínimo Interprofesional, reducir la brecha salarial equiparando, por ejemplo, los permisos de maternidad y paternidad.

Otro de sus compromisos es la de crear un nuevo marco para las relaciones laborales. “Lo que necesitamos es garantizar la estabilidad y no competir mediante las devaluaciones salariales”, ha señalado Nacho Álvarez, responsable económico de Podemos.

PSOE. Una de las primeras medidas que tomaría el PSOE si gobierna es derogar la actual reforma laboral ya que, en su opinión, “ha sido una fábrica de despidos”.  Según Manuel de la Rocha Vázquez, responsable económico del partido, España no necesita competir en salarios bajos, sino apostar por la industria, por unos poderes públicos activos y los sectores de valor añadido.

Para ello, la formación roja se compromete a elevar el Salario Mínimo Interprofesional, recuperar la negociación colectiva, crear un nuevo Estatuto de los Trabajadores, reforzar la causalidad de los despidos (es decir, que sea más difícil para una empresa echar a un trabajador), reducir a tres el número de contratos (fijo, temporal y formación) y recuperar las políticas activas de empleo duplicando para que los parados de larga duración puedan volver al mercado laboral. Al igual que Unidad Popular y Podemos, los rechaza los contratos únicos y la tarifa plana de PP y PSOE.

Pensiones: una guerra de impuestos, gastos y planes privados

El Gobierno ha confirmado que tendrá que sacar casi 8.000 millones de euros del Fondo de Reserva para poder pagar la extra a los pensionistas y la sostenibilidad del sistema vuelven a estar sobre la mesa. ¿Qué hacer entonces para garantizar las pensiones del futuro?

PP. El partido azul cree que una buena forma de conseguirlo es bonificando los planes de pensiones privados. Su programa electoral contempla que las plusvalías derivadas de estos instrumentos tributen por la tarifa del ahorro, no por la renta del trabajo. También propone incentivar a las familias para que tengan hijos. “En igualdad de condiciones, las madres deben recibir una pensión más alta que aquellas mujeres que no lo son, porque están contribuyendo. Además de lo que hayan cotizado deben recibir una extra”, ha insistido Nadal, quien ha recordado que la creación de empleo es la mejor manera de mantener el sistema.

Ciudadanos. Su alternativa es eliminar los gastos superfluos. “Hay que equilibrar las cuentas de todas las Administraciones, luchar contra el fraude, impulsar el empleo estable y fomentar las políticas de conciliación para que aumente la natalidad”, ha reconocido el partido, que rechaza la idea de crear impuestos para financiar el sistema.

Unidad Popular. Su principal apuesta huye del modelo mixto y se centra en uno 100% público. Para la formación, las medidas que se pueden tomar son incrementar las bases de cotización de los trabajadores, equiparar a los autónomos con los empleados del Régimen General de Trabajadores y evitar que las pensiones solo dependan de la Seguridad Social. “No tienen por qué venir solo de ahí. Proponemos que se asuman con cargos a los Presupuestos Generales del Estado”, ha reconocido Sol Sánchez.

Podemos. El partido tiene dos propuestas en mente para mantener el sistema: derogar las reformas que han hecho PP y PSOE en los últimos años. En concreto, quiere retrotraer la edad de jubilación a los 65 años (actualmente la edad de retiro está en 67 años) y volver a ligar la revalorización de las pensiones al IPC.

PSOE. La mejor solución para garantizar el sistema es a través de los impuestos. El partido asegura que a medio y largo plazo todos los partidos deben recuperar el diálogo, pero que está claro que España necesita aumentar los ingresos, lo que se puede conseguir a través de un tributo especial. La formación se muestra en contra de poner en marcha cualquier tipo de bonificación a los planes de pensiones privados.

La montaña rusa de los impuestos: subidas, bajadas y lucha contra el fraude

PP. La formación azul centra su estrategia impositiva en aliviar la carga de las rentas. Así, promete bajar el IRPF en todos los tramos (una medida que beneficiaría principalmente a las rentas medias y altas) y, como decíamos en el primer punto, reducir las cotizaciones sociales para fomentar el empleo fijo. Por otro lado, prevé seguir retocando el Impuesto de Sociedades para impulsar el crecimiento de las pymes, flexibilizar las subvenciones ligadas a la I+D para que se puedan acoger más empresas y dar ayudas a los investigadores españoles que están en el extranjero y regresen a nuestro país. En materia de IVA, no contempla modificaciones al alza, ni tampoco a la baja.

Ciudadanos. Entre las propuestas del partido naranja están reformar el IVA (quieren reducir de tres a dos los tipos: el 7% y el 18%), rebajar en tres puntos el IRPF (el máximo de las rentas bajas se quedará en el 18% y en el 42% para las más altas), exigir a todos los que se han acogido a la amnistía fiscal el dinero que se han ahorrado y reforzar los recursos humanos y económicos de la Agencia Tributaria para seguir luchando contra el fraude fiscal.

Unidad Popular. Su objetivo es reformar un sinfín de figuras impositivas para recaudar alrededor de 40.000 millones de euros. Por ejemplo, quiere reformar el Impuesto de Sociedades hasta elevar el tipo al 35%, crear un impuesto a las transacciones financieras, restringir las sicavs (los vehículos de inversión de las grandes fortunas) y poner en marcha un nuevo impuesto que grave la riqueza. No contempla, por tanto, ni bajadas de IRPF ni del IVA.

Podemos. El partido quiere llevar a cabo una nueva reforma fiscal para recaudar cerca de 40.000 millones de euros. “Queremos hacer que paguen los que no pagan”, sostiene la formación. Esta propuesta consiste en luchar contra el fraude (lo que podría recaudar unos 10.000 millones), subir el IRPF a las rentas más altas (a quienes ganen más de 60.000 euros al año) y modificar el Impuesto de Sociedades (para reducir la diferencia entre lo que las empresas deben pagar y lo que tributan realmente). También quiere armonizar el Impuesto de Patrimonio para establecer un mínimo en todo el territorio nacional; un tramo que no podrán bonificar las autonomías.

PSOE. La formación roja se compromete a luchar contra la economía sumergida creando 5.000 empleos nuevos en la Agencia Tributaria, crear impuestos vinculados a la contaminación, implantar un impuesto de Sucesiones mínimo en todo el territorio nacional, crear un tributo para financiar las pensiones, establecer en el Impuesto de Sociedades un mínimo del 15%, así como equiparar la tributación sobre rentas y capital para evitar que unas autonomías se pague menos que en otras.

Consulta aquí los programas electorales de estos cinco partidos: Partido Popular, Ciudadanos, Unidad Popular, Podemos y PSOE.