El desorbitado incremento de los precios de las viviendas en España en los últimos tiempos ha provocado que la tradicional inversión inmobiliaria europea, que hasta ahora acudía a la costa española en general y a la de Alicante en particular, se esté desplazando actualmente hacia los mercados turísticos emergentes del magreb, en particular Túnez y Marruecos, en busca de viviendas y complejos turísticos más económicos, según alerta Ramón jerez, presidente de la federación de la construcción de Alicante. El proceso es muy similar al que se produjo en España en la década de los sesenta, cuando el boom inmobiliario se vio arropado por el irresistible crecimiento de la industria turística en todo el litoral mediterráneo
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