¿Terminará el espectacular boom inmobiliario estadounidense en un "aterrizaje suave" o se espera una caída de una intensidad más brutal, que podría tener eco más allá de sus fronteras? La experiencia reciente en el reino unido y Australia muestra que un boom inmobiliario no ha de terminar en una caída del precio de las casas y un estancamiento prolongado económico. Existen pruebas que refuerzan la postura defendida por don kohn y alan greenspan, vicepresidente y antiguo presidente de la reserva federal respectivamente: un aterrizaje suave es posible y puede incluso que ya esté en marcha en los estados unidos. "No creo que el boom procediera del 1% de los tipos de interés de los fondos de la fed; surgió de la caída del muro de berlín", explicó alan greenspan. El final del comunismo "trajo a escena gran cantidad de mano de obra barata. Esto resultó deflacionista: los rendimientos de los bonos cayeron, al igual que los tipos de interés reales y los precios de los activos reales, como por ejemplo los precios de casas, se incrementaron espectacularmente"
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