La venta de viviendas de segunda mano subió en julio a un ritmo previo a la recesión. En concreto, las ventas crecieron un 2% en tasa intermensual, hasta un ritmo anualizado de 5,59 millones de unidades. Se trata de la mayor subida desde febrero de 2007. Con respecto al mismo mes del año pasado, las transmisiones aumentaron un 10,3%, según la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR).
Aunque el dato de las ventas de viviendas usadas sea bueno, los expertos alertan de la posible amenaza que hay por el bajo número de casas en oferta y el aumento de los precios. En concreto, el precio medio de venta de las viviendas se situó en 234.000 dólares (212.727 euros), un 5,6% más que hace un año.
Por su parte, el stock de casas usadas alcanzaba los 2,24 millones de unidades, un 0,4% menos que en junio y un 4,7% menos que un año antes, lo que cubriría la demanda de 4,8 meses al actual ritmo de ventas.
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