Las bajas laborales voluntarias están viviendo un 2025 récord. Según los datos de la Seguridad Social, las dimisiones de trabajadores indefinidos y eventuales alcanzan 2,35 millones en los primeros nueve meses del año, un 6,5% más interanual.
De hecho, los dos mejores meses de la historia han sido junio y septiembre, con más de 300.000 dimisiones en cada caso.
Según recuerda el diario El Economista, se trata de un dato sumamente sorprendente, sobre todo si tenemos en cuenta que el volumen prácticamente iguala al número de parados registrados (2,44 millones).
En concreto, el ritmo actual implica que casi 1 de cada 10 personas que estaban ocupadas al inicio del año ha abandonado voluntariamente su posición laboral en esos nueve meses, lo cual pone de manifiesto una movilidad laboral extraordinaria y unos niveles de confianza del trabajador en su posibilidad de cambiar de empleo que hasta ahora no se habían visto.
Sin embargo, detrás de estas cifras también surgen muchas incógnitas por aclarar, como qué parte de estas dimisiones responde a condiciones laborales mejorables (salario, flexibilidad, conciliación) y qué parte a una simple rotación voluntaria en mercados con alta demanda de mano de obra. Asimismo, cabe preguntarse si esta dinámica se mantiene en todos los sectores o se concentra en los más dinámicos o menos estables.
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