Una casa resistente al fuego rodeada de montañas y con vistas a un lago en Canadá

La Columbia Británica es una provincia de Canadá con unos paisajes espectaculares, donde destacan los grandes sistemas montañosos y los fiordos costeros. Sin embargo, en los últimos años ha sido una de las regiones con mayor número de incendios del país. Por esa razón, las viviendas de nueva planta que se construyen en mitad de estos paisajes extremos, deben estar preparadas para las inclemencias del tiempo.

En esta tesitura se vio el arquitecto Omar Gandhi en el diseño de un nuevo encargo, el cual se situaba en medio de un entorno natural. Para ello, su estudio buscó entre la misma naturaleza para inspirarse en la protección de estos fenómenos naturales, basando su diseño en un insecto que cubre su cuerpo con un caparazón: el escarabajo de montaña.

Conjunto Ema Peter

Una vivienda con caparazón de escarabajo

El proyecto fue llamado Mountain Beetle, en honor a la esencia de la vivienda, el escarabajo de montaña. La casa se encuentra situada en la cima de una montaña, con vistas al lago Okanagan y a las montañas circundantes.

El concepto de escarabajo de montaña se encuentra en el “caparazón” de la vivienda, el cual está concebido para proteger la casa de las condiciones climatológicas extremas. Así, tal como explica el propio estudio, está “pensada para resistir y reaccionar ante el entorno; la estructura tiene en cuenta el riesgo de incendio, el calor extremo, el viento y la nieve que soportan los lugares de gran altitud durante todo el año”.

Salón Ema Peter

Por esa razón, con el objetivo de proteger su interior de las inclemencias del tiempo, la vivienda está envuelta de una “cáscara” de acero resistente a la intemperie. Otros elementos de protección en el diseño se encuentran en los profundos voladizos existentes. Estos consiguen un mayor refugio en el perímetro de la casa frente a la nieve y la lluvia.

En el lado opuesto a estos elementos se encuentra el fuego. La casa se encuentra en una zona frecuentemente incendiada; por esa razón, está elevada sobre el paisaje y no cuenta con ventanas en la planta baja. Estos principios permiten sofocar en cierto grado las llamas, en caso que en la zona se declarara un incendio.

Cocina Ema Peter

Un interior protegido, cálido y abierto

La Mountain Beetle es una vivienda de 232 m2 distribuidos en dos alturas. La planta baja tiene una parte enclavada en el interior de la montaña. Todo este espacio interior sirve de garaje, almacén y zonas de servicio. La comunicación con la planta superior no se realiza por el interior, pues no hay escalera, sino por el exterior, a través de una escalera de acero cubierta que recorre toda la casa.

El acceso hasta la planta principal introduce a un espacio de concepto abierto, donde se encuentra la cocina, el salón y el comedor. Uno de los aspectos más impresionantes de este espacio es su forma de flecha, que se eleva e integra en el paisaje, proporcionando unas vistas espectaculares e ininterrumpidas del valle y la montañas que envuelven la vivienda.

Dormitorio Ema Peter

El techo cuenta con una claraboya que permite la penetración de luz natural. Las paredes revestidas de madera también ayudan a iluminar los interiores, así como una chimenea de leña que proporciona luz y calor. Por otra parte, la encimera de madera instalada en la isla de la cocina también aporta calidez al espacio.

En el ala opuesta a la de los espacios comunes se encuentran dos dormitorios y dos baños. Desde el dormitorio principal se accede a una terraza situada en la parte trasera de la vivienda. El tratamiento dado a las paredes en esta zona difiere del de las zonas comunes. Aquí, destacan las tonalidades beige y gris, con lo que se consigue un interior más apagado y sosegado.