Las ventas de viviendas de lujo podrían echar el freno a final de año, según los expertos

Aunque creamos que el sector del lujo es algo ajeno a muchos de los problemas económicos nacionales y mundiales, también pueden vivir cierta recesión. ¿Qué pasará con las viviendas de lujo a final de año? ¿Habrá más o menos transacciones? ¿Se reducirán los precios?

Bajada de compraventas

Los datos proporcionados por el INE indican un descenso del 10,5% en el número de transacciones de compraventa de viviendas en julio con respecto al año anterior, una caída que, a diferencia de la vivienda habitual, Iñaki Unsain, Personal Shopper Inmobiliario y director general de ACV Gestión Inmobiliaria, atribuye a la falta de demanda de compradores de inmuebles de lujo.

"Son viviendas con un coste de mantenimiento muy alto; la tendencia a tener menos hijos y menos necesidad de espacio han contribuido a que la demanda haya bajado y su precio no haya aumentado significativamente". 

En general, el experto anticipa que no veremos una diferencia significativa con respecto al nivel de compraventa de vivienda de lujo que hemos visto durante todo el año. “No creo que haya una gran desviación, tanto en demanda como en precio”.

En esta misma línea, Gonzalo Robles, CEO de Uxban, aboga por que el número de transacciones de viviendas de lujo seguirá descendiendo en lo que resta de año siguiendo un patrón similar al que hemos visto en el anterior semestre: “la oferta en el mercado es absolutamente insuficiente para absorber la demanda. Recoletos se encuentra con el stock más bajo de los últimos cinco años”.

Precios al alza por la falta de inmuebles

También hay una falta de viviendas en el sector lujo. Usain establece que es posible que haya una ligera variación positiva en el precio de aquellos sectores donde el suelo es muy limitado, como las zonas más exclusivas del centro de las principales ciudades del país, y, por lo tanto, donde las viviendas de lujo son un bien muy escaso.

El experto vaticina para final de año que pueden experimentar una subida en esas zonas donde este tipo de vivienda mantiene una demanda activa al margen de la inflación. “Siempre cuenta con gente con muchos recursos económicos que la quiera”. 

Robles es de la opinión de que los precios seguirán subiendo, a pesar del sobrecalentamiento en algunas áreas, mientras continúen las buenas perspectivas macroeconómicas es España para el cierre de 2023 y el 2024. Ahora bien, “Serán subidas moderadas de entre el 3 y el 4% por un perfil internacional que evidentemente no requiere de financiación bancaria y que ven en zonas como Madrid un mercado líquido y de bajo riesgo”.

De todos modos, y según Usain, la compra sin necesidad de financiación externa ha convertido a las viviendas de lujo en un activo que no se ha visto especialmente afectado en el precio por la inflación. “El valor de estos activos está bastante estancado en el mercado y muchos propietarios ofrecen buenos precios de compra si se acepta un pago al contado”, menciona.

Y que el aumento de los intereses por parte del Banco Central Europeo (BCE) no va a suponer un freno para las transacciones de vivienda de lujo. “La subida de los tipos de interés puede endurecer las condiciones de financiación en general, pero las personas que compran viviendas de lujo suelen hacerlo al contado, por lo que no se ven tan afectadas por estos cambios”.

La vivienda lujo en 2024

¿Qué pasará durante el año que viene? Gonzalo Robles, de Uxban, cree que la falta de producto provocará una intensificación del efecto contagio en barrios buenos de comprador nacional habitual pero no considerados tan top hasta el momento. La demanda se sigue desplazando hasta llegar hasta vecindarios menos explorados por el público extranjero como Chamberí, Trafalgar, Centro o Argüelles, Pintor Rosales en Madrid capital.

Por su parte, Iñaki Unsain, Personal Shopper Inmobiliario, ve un sector de lujo muy estable, “por ese motivo tampoco pronostico un alza en los precios más allá de lo que ya está”. Y veremos una buena respuesta en la demanda del activo de lujo bien ubicado en las principales ciudades como Madrid, Barcelona y las Islas Baleares y Canarias, donde este activo siempre está muy demandado.