Destinos en España que no podrás dejar de fotografiar

Ronda es una pequeña población malagueña cuyo principal encanto reside en su internacionalmente conocido Puente Nuevo. Este, junto a las casas blancas a su alrededor, se asoman al barranco de manera majestuosa desde el desfiladero componiendo una instantánea fabulosa.

Ernest Hemingway decía de Ronda que "la ciudad entera y sus alrededores son un decorado romántico" y como buen decorado merece que le dediquemos cientos de fotos. No te pierdas su casco histórico y su mezcla de culturas o sus empedradas calles por la magia que desprenden.

Toma nota de otros puntos de la ciudad que tienen que pasar por el objetivo de tu cámara: la Casa del Gigante, el Museo Arqueológico, la Iglesia del Espíritu Santo y la plaza de toros, una de las más antiguas de España.

Cudillero es un pueblo de pescadores asturiano, construido alrededor de un puerto, cuyas casas se sitúan sobre el acantilado como en forma de anfiteatro. Además, sus vecinos con el tiempo han ido adornando con colores sus fachadas, convirtiéndolo en una explosión cromática que atrae a miles de visitantes cada año. Estas casas, al tener casi medio pie en el mar Cantábrico, se convierten en fantásticos miradores desde las que sacar cientos de fotos.

Sin duda la mejor época para visitar esta pintoresca villa es en temporada baja, tendrás una postal preciosa a la vez que un ambiente tranquilo y agradable. Por último, ¡no te pierdas su casco antiguo declarado conjunto histórico-artístico!

La playa de la Concha sorprende cada día a propios y extraños por varios factores: su arena, su agua o su espectacular paseo. ¡Y no lo decimos solamente nosotros! los usuarios de Tripadvisor la consideran la mejor playa de Europa y la sexta del mundo, y no olvidemos que estamos hablando de una playa urbana. Por ello, prepárate para recorrer su paseo y sacar cientos de fotos de este maravilloso arenal. Si nos aceptas un consejo, podrás capturarla aún más bonita al atardecer.

Pero no te puedes ir de San Sebastián sin fotografiar varias cosas: el Peine del Viento, la obra más famosa de Chillida y cuanto más revuelto está el Cantábrico, mejor foto tendrás; el monte Igueldo, y su funicular de madera, será la zona perfecta si viajas con niños ya que hay un pequeño parte de atracciones en el que pueden jugar mientras tú disfrutas de la vista de la bahía de la Concha y la isla de Santa Clara. Y después de todo este turisteo puedes deleitarte en el epicentro del pintxeo donostiarra: "lo viejo", que es como llaman los lugareños al casco antiguo.

Si estás planeando una ruta por el sur y quieres un extra de paz y tranquilidad sin duda tu mejor opción es la ruta de los Pueblos Blancos. Entre ellos te puedes encontrar con una maravilla natural como Setenil de las Bodegas, una pequeña localidad de 500 habitantes en la que buena parte de sus vecinos viven dentro de una roca. Sí, así como suena.

En Setenil de las Bodegas no encontrarás "casas-cueva", directamente hay calles enteras integradas en la roca, por lo que podríamos hablar de "calles-roca". Recuerda visitar la Fortaleza Nazarí del siglo XIII, la zona de la Alcazaba, la antigua Casa Consistorial, el torreón o la casa de la Damita de Setenil.

No dejes de visitar cada rincón de este pueblo que te dejará sin habla y la memoria del teléfono llena de fotos.