La guerra de las casas colmena empezada por Haibu 4.0 en Barcelona llega a Madrid. La compañía, liderada por Marc Olivé, ya ha comenzado a desarrollar su negocio en la capital bajo el foco del Ayuntamiento de Madrid. “Están extendiendo su propia cortina de humo para asustar a la gente, para que realmente nadie se apunte, pero ya tenemos más de 3.000 reservas, no nos van a frenar”, ha explicado Olivé a idealista/news. El consistorio, por su parte, insiste en que su postura es inamovible: “Las Juntas de Distrito harán una labor de detección e inspección desde disciplina urbanística para impedir que operen en la ciudad”.
La andadura de Haibu 4.0 empezó en Barcelona, tal y como explicó idealista/news, con un gran número de trabas legales y problemas con la administración pública. Si bien Ada Colau, alcaldesa de la Ciudad Condal, ya alertó a la compañía de que podían enfrentarse a una multa de un millón de euros si no atendían a la petición del consistorio de no seguir adelante con el proyecto, Haibu 4.0 ha seguido adelante con sus planes, abriendo colmenas “clandestinas” por toda la ciudad.
“El problema, tanto en Barcelona como en Madrid, es que no han entendido el concepto del proyecto. Solo saben excusarse diciendo que ese habitáculo es ilegal, pero evidentemente nosotros tenemos unas leyes y artículos de urbanismo de la Comunidad Europea que nos amparan y que protegen nuestro proyecto”, insiste Olivé.
El directivo explica, además, que “ellos (los ayuntamientos) saben qué tipo de leyes estamos usando, qué formato de vivienda estamos preparando y saben que no la pueden parar. Por eso argumentan con la dignidad y con tonterías que no les van a servir de nada”.
Los fundadores de Haibu 4.0 comenzaron este proyecto, siempre según sus palabras, como un servicio social y como una solución al problema de la vivienda. “¿Que problema hay con montar un hotel con habitaciones a seis euros por día? El punto es que como ellos no saben de qué manera nos pueden bloquear o machacar, solo les queda apelar a la dignidad”, dice.
También defiende su postura asegurando que “lo más graves es que es una solución a la que los Ayuntamientos no han llegado. No se han puesto las pilas y yo creo que ese es el miedo que tiene la administración: que el pueblo vea que es un modelo que funciona y que diga: ¿Por qué no se os ha ocurrido esto a vosotros?”.
En su andadura por Madrid, Haibu 4.0 también ha empezado con mal pie. Según la empresa, la ciudad les ha negado la licencia para operar, pero según fuentes del Ayuntamiento “nunca ha sido solicitada”. No obstante, Olivé sigue cargando contra el consistorio: “Hemos tenido ‘trolls’ del Ayuntamiento de Madrid que se han infiltrado en nuestras colmenas para tumbar el proyecto desde dentro y como los hemos detectado, los hemos expulsado de las casas”, asegura el directivo.
El punto de inflexión será cuando abramos la primera colmena con licencia en Girona. Cuando vean que allí se ha permitido, que funciona perfectamente y que los residentes están contentos tendrán que callarse. La gente se pondrá en contra de los ayuntamientos que no lo permitan, porque son soluciones dignas”, concluye Olivé.
El Ayuntamiento, en pie de guerra contra Haibu 4.0
Fuentes del Ayuntamiento de Madrid consultadas por idealista/news en cuanto a la situación de Haibu 4.0 en la ciudad dan un mensaje claro y conciso: “desde el Área de desarrollo urbano no se ha concedido ninguna licencia, pero además es que tampoco la han pedido (entre otras cosas porque no cumplen la normativa y no se puede conceder)”, explican.
“Lo que va a hacer este Equipo de Gobierno es cumplir la normativa. Estamos dispuestos a cumplir la normativa urbanística en cuanto a las condiciones de habitabilidad, confort y calidad en las distintas estancias y en las distintas viviendas que nosotros exigimos en Madrid. Y no lo exigimos nosotros como grupo político, lo exige la norma urbanística y lo exige el Código Técnico de la Edificación; es decir, hay unas normas y las normas están para cumplirlas”.
El consistorio también habla sobre cómo la empresa está intentando operar con un negocio que no puede ser tal por las limitaciones legales que presenta. “Nosotros entendemos que ese modelo de negocio a día de hoy no tiene cabida en el ordenamiento jurídico y urbanístico de la ciudad de Madrid porque va en contra de las limitaciones y de las imposiciones marcadas por el Plan General; imposiciones y delimitaciones que, sin duda, desde el punto de vista técnico, facilitan el confort y la habitabilidad y esa es la posición que vamos a tener ahora y durante todo el mandato”.
En cuanto a la caza de las colmenas que Haibu 4.0 dice tener abiertas por la ciudad y las que, según la compañía, están en camino de ser abiertas, el consistorio es tajante: “las Juntas de Distrito harán una labor detección e inspección desde la disciplina urbanística”.
1 Comentarios:
Son espacios para dormir, para vivir tienen zonas espaciosas, es una solución para personas que no pueden permitirse pagar un piso, al ayuntamiento les parece más legal y humanitario dormir en la calle o en una cama a ratos
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