Brasil, paraíso de la construcción sostenible: 7.711 edificios levantados en 2013 tienen certificados de calidad ambiental

Artículo escrito por gorka ramos, colaborador de idealista news desde Santiago de Chile

Un Brasil de récord. Todas las perspectivas inmobiliarias para el gigante sudamericano apuntan a un aumento desconocido antes del sector. Hace unos meses, la asociación brasileña de entidades de crédito inmobiliario y ahorro determinó que en el primer semestre de 2013 los préstamos para la adquisición y construcción de viviendas en Brasil totalizaron cerca de 22.000 millones de dólares, con un incremento del 34% respecto al mismo período del año anterior

Ante semejante crecimiento, los proyectos que abogan por la calidad de las construcciones parecen imprescindibles para que se dé un desarrollo ordenado y sostenible. De los 244.700 inmuebles financiados en Brasil entre enero y junio de este año, 7.711 unidades fueron validadas por el programa de 'alta qualidade ambiental' (aqua), un certificado que acredita la eficiencia energética y su contribución socioeconómica a la zona en la que están instaladas

Esta circunstancia convierte a Brasil en líder regional en construcción sostenible gracias al millón de metros cuadrados levantados bajo las directrices del programa ‘aqua’, desarrollado por la fundación vanzolini, se basa en el francés 'haute qualité environmentale' (hqe)

"El proceso no propone sistemas o procesos constructivos ni soluciones o materiales concretos, lo que se pide es un proyecto coherente y con un buen desempeño ambiental", explica el coordinador ejecutivo del proceso aqua, Manuel martins. El certificado avala la correcta planificación, desarrollo y ejecución del proyecto, la entrega o incluso el desarrollo del edificio en su vida útil y su hipotética demolición

El país que albergará el próximo mundial de fútbol y las olimpiadas de 2016 es una de las naciones que más invierte en la sostenibilidad de sus construcciones a nivel mundial, lo que además de le convierte en un lugar preferente para el "aterrizaje" de inversores inmobiliarios de todo el orbe. Y aún quiere más