Viviendas de lujo a la venta en el rascacielos más delgado del mundo

En el lujoso barrio neoyorquino de Midtown Manhattan, se encuentra este edificio que abrió sus puertas en 2021 y a día de hoy se lleva el título del “rascacielos más delgado del mundo”. Con 435,3 metros de altura y una relación ancho alto de 24:1, el Steinway Tower está en una zona que alberga varios de los edificios más famosos de la ciudad, como el Empire State Building o el Museo de Arte Metropolitano.

Cuenta con 84 plantas donde han creado 60 apartamentos de lujo, la última se encuentra a 345,5 metros de altura y en ella encontramos un ático triple con vistas a Central Park. El rascacielos comenzó a construirse en 2013 y se clasifica también como uno de los edificios más altos de occidente, por detrás de One World Trade Center y el Cetral Park Tower, con 541 y 472 metros, respectivamente.

Los responsables del proyecto han sido JDS Development, Property Markets y SHoP Architect. La obra debería haber terminado en 2017, pero durante el proceso surgieron varios problemas: las regulaciones de la ciudad obligaron a cambiar la clasificación del rascacielos, se debieron hacer excavaciones naturales para evitar molestar a los vecinos con los ruidos, y los costes de construcción alcanzaron un total de 2.000 millones de dólares (unos 1.900 millones de euros al cambio actual).

Los edificios extremadamente delgados o “torres de lápiz” comenzaron a realizarse en Hong Kong durante la década de los 70, y a partir de entonces muchas de las ciudades como Nueva York han seguido su ejemplo. La inspiración detrás del proyecto han sido la edad de oro de los rascacielos de Manhattan y la historia Art Deco de Nueva York, en un proyecto que buscaba dar una nueva interpretación al horizonte de la ciudad, pero respetando sus raíces históricas.

De hecho, el rascacielos está construido sobre la base del Stainway Hall, un edificio levantado en 1925 por los arquitectos Warren & Wetmore y donde se encontraba la casa del famoso fabricante de pianos Steinway and Sons, así como su sala de conciertos.

En cuanto al diseño, destaca el uso de la piedra caliza en el vestíbulo principal, así como el mármol, el acero y el terciopelo. Y la fachada exterior tiene bloques de terracota apilados, que dan un efecto escalonado al edificio y cambian de color y textura dependiendo de la luz y el ángulo.

En el interior hay una piscina de doble carril de 25 metros, salas de entrenamiento y sauna, un gimnasio de doble altura con terraza, una pista de pádel, cocina de catering y comedor privado, salón con terraza, salas de reuniones y zonas de estudio.

Cada apartamento cuenta con vistas a Central Park, las dimensiones van desde los 359,8 a los 662,2 m2, y los precios oscilan entre los 10 y los 66 millones de dólares (entre 9,48 y 62,6 millones de euros). Según lo describe Street Easy, una de las firmas encargadas de vender los inmuebles, se trata de “una fusión de artesanía, materiales e ingeniería enfocada a establecer un nuevo estándar de vida de lujo”.