Tras la venta de la mitad de su cartera inmobiliaria hace menos de un año al fondo Lone Star por 930 millones de euros, Kutxbank pretende reducir al mínimo su negocio vinculado al ladrillo. Ahora espera lograr al menos 834,5 millones de euros por el resto de activos en los próximos tres años, según explica en su informe anual.
La entidad bancaria Kutxabank pretende reducir drásticamente el impacto de los activos inmobiliarios en su balance y en los próximos tres años intentará dar salida a su cartera, valorada en 834,5 millones de euros. Estos activos se dividen en edificios, pisos, parcelas, solares, naves, locales, garajes y otros bienes distribuidos por varias comunidades autónomas.
Kutxabank admite las dificultades del mercado para poder vender estos inmuebles con rapidez. Con esta operación, la entidad reduciría su portfolio de inmuebles hasta mínimos tras vender hace 10 meses la mitad de su cartera al fondo norteamericano Lone Star por 930 millones de euros, agrupados bajo Neinor.
El acuerdo incluía que la venta de los activos aún en la cartera de Kutxabank también estarían gestionados por Lone Star durante los próximos siete años. La entidad vasca ha confirmado además el cambio de denominación de seis sociedades inmobiliarias que pasaran de nombrarse Neinor por Harri.
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