La hipoteca fija de Santander, una opción barata para comprar cualquier vivienda

Banco Santander está comercializando una de las mejores hipotecas fijas esta primavera, con una oferta que va dirigida a la compra de cualquier vivienda. 

El grupo financiero tiene una oferta fija a un tipo de interés del 2,55% durante los primeros seis meses, aunque pasado ese plazo baja una décima, hasta el 2,45% (3,07% TAE), si el cliente se aplica las máximas bonificaciones.

Para optar a esas condiciones, en necesario domiciliar los ingresos en la entidad, ya sea una nómina de más de 600 euros mensuales, una pensión o una prestación por desempleo superior a 300 euros, o la cuota de la Seguridad Social en el caso de autónomos que supere los 175 euros al mes. Otra alternativa es que alguno de los prestatarios tenga domiciliadas las ayudas de la PAC, independientemente de su importe.

También implica usar al menos seis veces una tarjeta de crédito de Santander en los tres meses anteriores a la revisión del tipo de interés, contratar y tener en vigor algún seguro (hogar, vida, accidentes, incapacidad temporal…), y contratar un sistema de seguridad en la vivienda de Movistar Prosegur Alarmas. Y a ello se añaden unas bonificaciones especiales si el inmueble objeto de la operación de financiación tiene un elevado nivel de eficiencia energética. 

En el caso de que no se cumpla ninguno de dichos requisitos, el tipo de interés de la hipoteca fija de Banco Santander se mantiene en el 2,55% durante el primer medio año desde la firma, pero a partir de entonces asciende hasta el 3,55% (3,74% TAE), un nivel que está 1,1 puntos porcentuales por encima de la oferta bonificada.

Entre las ventajas de este préstamo fijo es que va destinado tanto a la compra de primeras como segundas residencias. En el caso de viviendas habituales, el banco está dispuesto a prestar hasta el 80% del valor de tasación, mientras que el porcentaje se reduce hasta el 70% si la financiación es para adquirir un segundo inmueble. En términos generales, Santander establece un plazo de contratación de hasta 25 años para hipotecas sobre segundas residencias y hasta 30 años para viviendas habituales.

En cuanto a las comisiones, solo hay penalización por las amortizaciones anticipadas, ya sean pagos parciales o la cancelación total de la hipoteca. Como la inmensa mayoría de las entidades, Santander establece una comisión máxima del 2% del capital adelantado si el desembolso se realiza en los primeros 10 años desde la firma, y un 1,5% a partir de entonces, de acuerdo con los límites que establece la normativa hipotecaria de 2019. En ningún caso la compensación podrá exceder del importe de la pérdida financiera que pudiera sufrir la entidad.