El polémico plan para desmontar el Edificio España como si fuese un Lego

El propietario del emblemático Edificio España, el chino Grupo Wanda, quiere desmontar la fachada protegida del rascacielos planta por planta –y casi ladrillo por ladrillo– como parte de un polémico plan de reforma que trata de convencer al ayuntamiento de Madrid de la necesidad de rehabilitar el edificio por completo. Los ingenieros y arquitectos de Wanda ya han dividido el frontis y laterales en más de 10.000 ‘piezas’ para volver a levantarlo “tal y como lo conoce todo el mundo”.

El grupo chino lleva realizando análisis y estudios sobre la situación del edificio y cómo acometer la intervención para la reforma desde la compra del edificio en junio de 2014 al Banco Santander por 265 millones de euros. Su conclusión es que el actual estado de la estructura y la fachada son inviables para su mantenimiento.

Además, puede peligrar su conservación y suponer un riesgo para las ciudadanos si se decide apuntalar el frontis durante las obras. “Sostener en pie una fachada de 117 metros de altura y 20 metros de grosor es prácticamente inviable”, aseguran los técnicos, que argumentan que la base de la fachada no es suficientemente alta para aguantar tanto peso ni las embestidas del viento.

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Wanda ha presentado su propuesta al Ayuntamiento de Madrid a través de una Consulta urbanística especial para que le permita iniciar los trabajos de desmontaje de las fachadas delanteras y laterales planta por planta para su posterior reconstrucción exacta del edifico. El promotor pretende abrir las puertas del edificio como centro comercial, hotel de cinco estrellas y viviendas de lujo para mediados de 2019.

“Queremos conservar la imagen exterior del edificio tal y como la conoce todo el mundo. Pero es necesario una intervención completa sobre el rascacielos para solucionar sus problemas estructurales”, afirma Michael Qiao, director general de Wanda Madrid Development. “Cumpliremos todas las exigencias y normativas actuales de calidad, confort y seguridad. Restauraremos o sustituiremos los elementos de la fachada con los mismos materiales y acabados originales, ladrillo y piedra blanca”.

Los expertos consultados por Wanda defienden esta postura. “Por cuestiones de prevención de riesgos y seguridad, hay que optar por desmontar el edificio planta a planta para luego remontar con idéntica conformación y aspecto. Ni el volumen, ni la apariencia, ni el color del edificio se verían alterados", según Rafael Anduiza, arquitecto técnico y licenciado en Derecho.

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Por su parte, Ignacio Fernández, ingeniero consultor de la firma ARUP desgranó el estado actual de la estructura. “Las vigas y forjados que soportan la fachada están deteriorados. Han cumplido su vida útil y se hace necesario una profunda intervención sobre la misma”.

Sin alternativas viables 

La compañía Valladares Ingeniería elaboró planes alternativos para mantener la fachada tal cual está en estos momentos, y como exige la normativa de edificios protegidos. Por un lado mantener la estructura actual. Pero se encontraron con que dicha fachada no era capaz de soportar los 100 kilos de presión que habría desde los laterales bajos de la fachada y los 200 kilos desde la corona. “Al desmontar el interior, los esfuerzos no llegarían a los contrafuertes”, concretó Juan Manuel Benito, consultor de estructuras de la ingeniería.

La segunda opción pasaba por levantar una estructura metálica para mantener las fachadas. “Se descartó por los daños que podría causar a la fachada al tener que estar anclada y las deformaciones del metal por el efecto térmico que sufren”.

Negociaciones con Carmena

El Edificio España se encuentra dentro del Catálogo de Protección de Edificios del Plan General de Urbanismo de la capital con un grado de protección Nivel 3 (Grado Parcial), que permite la reestructuración total del edifico pero manteniendo la fachada principal.

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Wanda Madrid se agarra a un resquicio legal para poder derruir la fachada. Según el PGOU, “cuando en algún edificio con protección en los grados volumétricos o parcial no sea técnicamente posible la ejecución de las obras permitidas manteniendo un elemento catalogado, se podrá solicitar un desmontaje o posterior reconstrucción con los mismos materiales, forma y dimensiones que tenía en origen”.

La normativa municipal obliga a preservar la fachada original durante las obras de reforma. La portavoz del Ayuntamiento Rita Maestre adelantó que, en muy pocos días, tendrán dos informes técnicos del área de Desarrollo Sostenible sobre el edificio. “Es viable mantener la fachada y hacer reformas del edificio”, afirmó.

Tanto la Comunidad de Madrid como el consistorio municipal han remarcado el compromiso que el Grupo Wanda adquirió de no tirar la fachada del Edifico España por su valor histórico.