Una compañía, astroc, y un sector, el inmobiliario. La primera llegó a valer en bolsa 9.000 millones de euros hace justo un año y el segundo más de 51.000 millones. Doce meses después la capitalización de astroc no alcanza los 500 millones y el precio de mercado de las inmobiliarias cotizadas apenas roza los 19.000 millones. El sector ha perdido un 62% de su capitalización desde los máximos históricos alcanzados a principios de 2007. Después de un año marcado por la incertidumbre, los motivos del deterioro del sector presentan pocos secretos para los expertos. La efervescencia del mercado inmobiliario español y los movimientos corporativos forzaron que las inmobiliarias llegaran a valer más que sus propios activos. Pero el frenazo del negocio inmobiliario agravado por la crisis crediticia ha desencadenado en el último año una rebaja de la valoración de las propiedades del sector y un deterioro de su situación financiera que no ha tardado en trasladarse a las cotizaciones
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