El objeto de la denuncia es el acuerdo alcanzado el año pasado entre el real Madrid, la comunidad autónoma de Madrid y el ayuntamiento de esta ciudad, por el que las instituciones madrileñas se comprometieron a cambiar la calificación urbanística de los terrenos donde está ubicada la ciudad deportiva, lo que supondría la recalificación de 30.000 m2 de suelo que antes eran equipamientos deportivos privados y pasarían a ser genericamente como "terciarios", es decir, oficinas, establecimientos comerciales y hoteles. Ciu recuerda que la recalificación y el proyecto del real Madrid de construir en esa zona cuatro torres le permitirá obtener una importante entrada de ingresos atípicos, "que no sólo absorberá la gran deuda existente en el club, sino que le situará financieramente por delante de sus competidores. Siendo el fútbol europeo un mercado único por imperativo de la normativa comunitaria, hay que tener en cuenta que una situación de favoritismo para un club español no sólo afectará a otros equipos españoles sino también a otros países de la unión europea"
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