La nueva ordenanza municipal entrará en vigor a los 6 meses de su publicación en el boletín oficial de la comunidad autónoma de Madrid y obligará a todos los nuevos edificios y aquellos que se reestructuren por completo a incorporar placas solares para producir agua caliente sanitaria y para la climatización de piscinas. Los paneles deben servir para calentar entre el 60 y el 75% del total del agua caliente que se consuma en el edificio. No cumplir con esta norma acarreará multas de entre 600 y 3 millones de euros
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