El presidente de bami, Joaquín rivero, sigue llevando el "día a día" de metrovacesa pese al veto de la comisión nacional del mercado de valores (cnmv). Su control es prácticamente total. Fue suya la decisión a finales de mayo de vender el centro comercial la moraleja green por 84,1 millones de euros al grupo holandés ing, a pesar de contar con otros cuatro complejos en cartera. Accionistas minoritarios de metrovacesa entienden que esta venta "implica una pérdida importante del valor patrimonial de la empresa, máxime cuando el 80% de la cifra de negocio proviene de la actividad pratrimonial". En otros casos, las quejas de los accionistas tienen que ver con la actitud poco ortodoxa en la gestión de la compañía. Así las recomendaciones realizadas por la comisión de auditoría han sido en su mayor parte ignoradas, reduciéndose a mínimos el grado de cumplimento del manual de política financiera del grupo
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta