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Después de las compras y fusiones que poblaron 2003, las empresas inmobiliarias han pasado un año tranquilo recogiendo, un ejercicio más, enormes beneficios por sus actividades y con una actuación muy positiva en bolsa. Fue precisamente una salida al parqué, la de la inmobiliaria gallega fadesa, una de las que más expectativas creó. En mayo se esperaba un estreno espectacular, con una sobresuscripción que rondaba las 10 veces pero al final las cosas no salieron como se esperaban. Fadesa salió a bolsa el 29 de abril a 12,4 euros y el valor no logró cerrar por encima del precio de colocación hasta el 23 de noviembre. Desde entonces ha subido hasta 12,85 euros

El movimiento más audaz lo ha protagonizado la constructora sacyr-vallehermoso hace apenas unas semanas. La quinta constructora de España y la más endeudada anunció que pretende hacerse con el 3,15% del bbva, la segunda entidad financiera en España, y entrar en su consejo de administración. De momento, la constructora se ha encontrado con el rechazo frontal del consejo del banco con su presidente, Francisco González, a la cabeza. El mercado también ha castigado este movimiento y las acciones de la constructora han bajado un 10% desde este anuncio, pero Luis del rivero, presidente de sacyr-vallehermoso, no desiste en su idea y ha anunciado su intención de seguir adelante con la operación, cuyo desenlace no veremos hasta 2005. Rivero tiene buenos motivos para persistir en su intento. Después de todo, el bbva es propietario del 72,5% de la sociedad desarrollo urbanístico chamartín (duch), que posee los derechos de la famosa y polémica operación chamartín, el desarrollo urbanístico más importante que tendrá lugar en Madrid en los próximos años con la urbanización y edificación de más de tres millones de metros cuadrados

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