El sector de la construcción pulveriza sus propias marcas. Las últimas cifras oficiales indican que más de 223.000 empresas relacionadas de una u otra manera con el ladrillo están dadas de alta en los registros de la seguridad social. Se trata de una cifra histórica que refleja el papel cada vez más relevante que juega la construcción en el conjunto de la actividad económica. Lo más importante, sin embargo, no es el número absoluto sino la velocidad de vértigo del ritmo de creación de empresas constructoras. Desde que comenzó el boom inmobiliario -en 1998- nada menos que 100.000 empresas se han dado de alta en los ficheros oficiales del ministerio de trabajo. De las 123.975 que existían ese año se ha pasado a las 223.229 contabilizadas el pasado mes de septiembre. Un crecimiento verdaderamente espectacular que explica el hecho de que, actualmente, haya en España más empresas dedicadas al sector de la construcción (en el sentido amplio del término) que a actividades industriales (78.000 menos)
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