La crisis inmobiliaria española no sólo afecta a las empresas nacionales sino también a las compañías extranjeras que se establecieron en España al calor del boom inmobiliario. Éste es el caso de la británica taylor woodrow, que sufre el descenso de ventas y además la revalorización del euro contra la libra esterlina, que hace más difícil la compra de casas por los británicos. Por ello, la empresa ha tenido que rebajar el precio de algunas de las 50 viviendas que venden en España, de las que 17 están en cala d'or, costa de los pinos y puerto pollença. En concreto, vende apartamientos con un 25% de descuento. Antes costaban 260.000 euros y ahora están a la venta por 190.000 euros
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