La economía irlandesa se contrajo por sorpresa y los problemas bancarios arrastran a al deuda. El miedo a que Irlanda y Portugal no puedan pagar sus deudas se multiplica y está ya al mismo nivel que Grecia en enero, cuando se hizo inevitable su rescate. Los analistas no descartan dificultades
La economía irlandesa es la que más preocupa actualmente a los inversores. Cayó un 1,2% en el segundo trimestre de manera inesperada y siembra dudas en los analistas. Sus bonos a 10 años dispararon su precio a su diferencial más alto en relación con el bono alemán de la última década, hasta llegar a pagar un interés de más del 6%
Portugal tampoco vive sus mejores momentos. Sigue sin tomar medidas de calado para lograr controlar el déficit y eso preocupa a los inversores europeos. La buena noticia es que España tiene reciente la publicación de la buena nota que obtuvieron sus pruebas de esfuerzo a la banca y de momento, parece ajena a los problemas que acechan a Irlanda y Portugal
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