El precio de la vivienda en shanghai ha bajado entre un 10% y un 15% desde el verano mientras que en algunos inmuebles de lujo la caída ha sido de hasta un 30%. El volumen de ventas se ha reducido en un 70% en estos meses. Estos descensos son el resultado de la nueva política fiscal introducida por el gobierno de shangai en junio: para evitar la especulación inmobiliaria se aplica un impuesto especial a todas las viviendas compradas y posteriormente vendidas dentro de un plazo de dos años. Esta medida ha provocado que el sector espere bajadas medias de alrededor del 20% hasta el segundo semestre de 2006, cuando se empiecen a recuperar los precios. De todas formas, "todavía hoy el precio medio es significativamente inferior al de otras capitales de su entorno", según michael thompson, director ejecutivo de cushman and wakefield's
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