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Los hogares españoles se enfrentan a una brecha cada vez mayor entre los ingresos que perciben y el gasto que tienen que asumir para adquirir una vivienda, ya que en la actualidad necesitan más de siete años de su renta neta para comprar un piso, según publica caixa catalunya en su último informe de coyuntura económica [caixa catalunya es accionista de referencia de idealista.com, empresa editora de este boletín]. Esta cifra contrasta con la correspondiente del año 1996, cuando un hogar necesitaba destinar el ingreso neto íntegro obtenido durante 4,6 años para poder adquirir una casa. El informe revela que el "deterioro de la accesibilidad" a la vivienda se debe al aumento del precio de los inmuebles y constata que entre 1996 y 2003 la capacidad de las familias para comprar una vivienda mejora porque el ingreso neto por asalariado se incrementó un 23,2%. Además aumentó el número de asalariados por hogar de 1,5 en 1996 a 1,64 en 2003. La combinación de ambos factores provocó que, entre 1996 y 2003, la renta salarial familiar se incrementara un 34,5%. Sin embargo, este crecimiento se ha contrarrestado por el precio de la vivienda que aumentó un 106,2% durante esos siete años

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