Después de meses hablando de burbuja inmobiliaria, todos los agentes del sector empezaron a resaltar la importancia de fomentar el alquiler. Durante el verano, el ejecutivo desarrolló un proyecto de ley que permitía deducciones importantes a las personas que decidieran alquilar una vivienda. En septiembre, el pp presentó varias enmiendas que mejoraban las deducciones para los arrendadores. Así, las enmiendas preveían la posibilidad de deducir todos los gastos derivados de reparaciones y servicios prestados por terceros para el mantenimiento de una vivienda que se tenga en alquiler, algo que se había eliminado en la redacción inicial del proyecto en la declaración de la renta que se presente en 2004 de los ingresos que los contribuyentes obtengan en 2003 por el arrendamiento de inmuebles propios podrán deducir un 15% de los rendimientos brutos o un 40% en el caso de que las viviendas estén desocupadas y se alquilen hasta el 31 de diciembre de 2004 también podrán deducir los intereses de préstamos hipotecarios, un 3% del valor catastral del inmueble o el coste de adquisición en concepto de amortización; los tributos y recargos; los saldos de dudoso cobro y, en concepto de gastos de difícil justificación, un 10% de los rendimientos íntegros. Este último punto ha sido también modificado por una enmienda del pp, ya que el proyecto enviado a las cortes señalaba que este porcentaje del 10% se aplicaba sobre los rendimientos netos, es decir una vez descontadas todas las deducciones, y ahora se extiende a rendimientos brutos, con lo que la deducción a la que tendrán derecho los arrendatarios de viviendas es mayor como complemento a las deducciones al arrendador, los gobiernos autonómicos han desarrollado varias medidas para que el alquiler desgrave también al arrendatario. En Madrid la medida está dirigida a jóvenes menores de 35 años que podrán deducir en su declaración de la renta el 20 por ciento de las cantidades satisfechas por el alquiler, el doble de lo establecido en un primer momento. La cifra total de deducción no podrá superar los 700 euros (100 euros más de los establecido inicialmente). En Cataluña la deducción es de un 10% y pp y ciu aún en diciembre debaten sobre quién podría acogerse a estas medidas. Mientras ciu quiere que afecte a menores de 32 años, parados, viudas, discapacitados y familias numerosas; el pp no incluye a las viudas y quiere que afecte a todas las familias, sean o no numerosas
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