Veinte grandes empresas de electrónica, electrodomésticos y computación, con el patrocinio del ministerio de economía japonés y de la asociación de industrias se han unido para probar cincuenta aparatos electrónicos, valorados en 38.000 dólares, en una casa real situada en tama, un suburbio al oeste de tokio el experimento consiste en instalar diferentes aparatos electrónicos, la mayoría de ellos basados en el control remoto a través del teléfono móvil. Una caja grande, ubicada en la entrada de la casa, recibe los pedidos y entrega un recibo al transportista. Junto a ella, un portero automático fotografía a las visitas que llaman a la puerta. En la cocina, una pantalla supervisa todo lo que pueda encenderse, como la cocina, el horno (que está conectado a Internet y puede memorizar miles de recetas) las luces, el aire acondicionado, la apertura automática de persianas, etc. además en esta pantalla se pueden ver películas en DVD
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta