El famoso actor español Antonio Banderas acaba de decir adiós a una de sus propiedades más emblemáticas tras perder todos los recursos para evitar el derribo de ‘La Gaviota’, un chalet con un amplio jardín por encontrarse en una zona protegida, según avanzó la Revista Lecturas.
La historia se remonta a la época de los desmanes urbanísticos protagonizados por el entonces alcalde de Marbella, Jesús Gil y Gil. En los años 90, estos terrenos situados cerca de la playa de Los Monteros se descalificaron como suelos públicos de la ciudad para hacerlos urbanizables. En 1995, la famosa periodista de la radio y la televisión, Encarna Sánchez, levantó el chalet, y tras su fallecimiento, Antonio Banderas se hizo con la propiedad en 1996.
Desde entonces, las acciones legales contra este inmueble se han ido sucediendo, pasando de un tribunal a otro durante estos 28 años. Y es que la licencia de construcción de la propiedad, otorgada antes de que fuera propiedad del actor, fue anulada por la justicia en 2003.
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) dejó sin efecto el permiso municipal de 1995. El actor recurrió la sentencia, que fue desestimada por el este mismo tribunal en 2008.
Mientras tanto, en 2010, el Plan General de Organización Urbana de Marbella legalizó la casa, pero este plan también llegó al Tribunal Supremo.
Además, en 2014, llegó a un acuerdo con el Ayuntamiento por el que la estrella de Hollywood cedió más de 1.200 m2 de jardín para ampliar el paseo marítimo de la zona. Pero la batalla judicial ha continuado y finalmente los tribunales han decidido su derribo por completo.
En 2015, el Alto Tribunal invalidó el PGOU de Marbella, por lo que se suspendió su legalización junto con otros miles de hogares irregulares, y desde entonces ha seguido con esta situación. Finalmente, el artista ha decidido derribar la vivienda.
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