Piscina de obra o piscina desmontable: ¿cuál elegir?

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yaencontre (Colaborador de idealista news)

25 Mayo 2022, 6:04

Ahora que se acerca el buen tiempo, muchas personas se preguntan nuevamente qué es mejor elegir en casa: piscina de obra o piscina desmontable. La respuesta no es nada sencilla, pues depende del tamaño de cada vivienda y también de las necesidades de los que habitan en ella. Veamos algunas de las ventajas y pros de cada una de ellas.

Si bien, sea cual sea la opción escogida, tener una piscina en casa permite disfrutar de un verano distinto, en familia, y poder refrescarse cuando uno quiera.

Cuestión de tamaño

Si tienes la suerte de tener una casa más grande, entonces quizás tengas la posibilidad de realizar una piscina de obra, aunque su construcción también depende del tipo de terreno. Normalmente, suelen tener un tamaño más grande y ello precisa también de un mantenimiento.

Mientras que una piscina desmontable puede ser de gran tamaño, pero también las hay más pequeñas, adaptadas al espacio que tengas. Así que si la vivienda no es muy grande, pero posee algo de jardín, entonces las piscinas desmontables son, prácticamente, la única opción posible.

Cuál será su uso

Otra de las preguntas que nos haremos a la hora de elegir el tipo de piscina antes de comprarla, es el uso que le vamos a dar.

Según Grepool, la cosa cambia si se usa con mucha frecuencia o bien se le da un uso esporádico. Aquí influye el factor de si hablamos de una segunda residencia de poco uso o de la vivienda habitual.

En el caso de que sea una casa de verano, y la piscina se vaya a utilizar durante un periodo de tiempo limitado, entonces es mejor decantarse por una desmontable. Se suele montar cuando empieza a hacer calor y se desmonta al final del verano, de forma fácil y sencilla.

Mientras que, si hablamos de una vivienda habitual, te gusta nadar y prevés que se va a utilizar durante bastante tiempo, nada mejor que la de piscina de obra.

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¿Qué presupuesto tenemos?

Más allá del espacio y el uso, que son factores importantes, está claro que el presupuesto es lo que prevalece cuando hay que decidir entre un tipo u otro de piscina. Las de obras necesitan de una inversión en construcción, mantenimiento durante todo el año, materiales y productos empleados… por esto el presupuesto es mayor. Las desmontables cuestan menos dinero y son fácilmente instalables por uno mismo.

Ventajas de las piscinas desmontables

Son más económicas: es una clara ventaja para elegir estas piscinas, especialmente si nuestro presupuesto es menor y la vamos a usar solamente durante un mes, dos o menos en verano.
Sencillez de instalación: las actuales son realmente fáciles de instalar, pues esto se hace una vez (al principio del verano) y luego se quita (al final de la temporada) guardando en un lugar adecuado todas las partes de la piscina desmontada para poder ser instalada nuevamente en la próxima temporada veraniega.
Hay de diversos tamaños: ahora hay piscinas desmontables de varios tamaños, así se adaptan al lugar que tenemos disponible para ello. Además, suelen dejar libre la zona que ocupan en verano porque la piscina se guarda y el espacio se destina a otros menesteres.
Mínimo mantenimiento: dependiendo de cómo sea la piscina desmontable, el mantenimiento es mínimo, se necesita un filtro, una bomba con filtro para periódicamente filtrar el agua y productos como cloro y antialgas para que el agua no se ensucie.

Contras de piscinas que se montan

Suelen estar sobre el suelo y no siempre es factible
Deben tener una profundidad máxima
Sirven para refrescarse, pero no para nadar

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Pros de las piscinas de obra

Personalización: no tienen un tamaño limitado, si no que cada uno la construye según sus preferencias. Además, su diseño se realiza según lo que quiera el cliente.
Pueden durar para siempre: normalmente este tipo de piscinas son duraderas y se tienen para siempre, constituyendo una parte más de la casa.
Aumentan el valor de una vivienda: una casa con jardín, terraza y piscina suele aumentar su valor al paso de los años, algo a tener en cuenta si queremos alquilarla o si prevemos que la vamos a vender en unos años.
Permite nadar y otros: a diferencia de las piscinas desmontables, suelen tener mayor profundidad, nos refrescamos y podemos nadar y hacer deporte en ella.