Aunque un inquilino sea moroso, no se puede entrar a la vivienda ni a pedir el alquiler
La hija de una propietaria de una vivienda en Jaen ha sido condenada a seis meses de cárcel por un delito de allanamiento de morada cuando se presentó en la vivienda de su inquilino, que no pagaba el alquiler, para reclamarle el pago
La acusada se negó a abandonar el domicilio pese a ser requerida p