Los áticos son una de las tipologías de vivienda más codiciadas, ya que ofrecen unas posibilidades únicas y variadas. En idealista, puedes encontrar miles de estas propiedades en venta. Pero si ya eres el propietario de uno, quizá te interese saber si se puede construir una piscina o un jacuzzi en un ático. Esto es lo que debes tener en cuenta.
¿Se puede construir una piscina o un jacuzzi en un ático?
Construir una piscina o un jacuzzi en un ático es el sueño de muchos, pero puede convertirse en su peor pesadilla. Si, por ejemplo, la estructura del edificio no soporta el peso de la instalación, el problema podría alcanzar cotas terribles: derrumbamientos, goteras, etc.
En el caso de que te plantees construir una piscina o un jacuzzi para un ático de obra nueva, la cuestión es más sencilla, además de que muchas promociones contemplan esa posibilidad, a demanda del propietario. Si se está construyendo la vivienda en la actualidad y tienes dudas, lo mejor es que preguntes al promotor si es viable.
En el caso de que el edificio ya esté terminado, antes de instalar una piscina o un jacuzzi debes tener en cuenta una serie de cuestiones. “Si se trata de construir una piscina o un jacuzzi en un edificio nuevo, tienes que tener en cuenta la sobrecarga que va a implicar”, comenta Juan Goñi, fundador de KLIC Arquitectos.
“Por otro lado, si el edificio ya está construido, es fundamental evaluar la capacidad de carga de la estructura para evitar sobrecargar el forjado. En caso de que el sistema estructural sea reticular, es recomendable distribuir el peso en las zonas de mayor soporte, como las áreas inferiores, siempre bajo la supervisión y asesoramiento de un profesional especializado”, añade el arquitecto.
¿Qué hay que tener en cuenta?
Para saber si es viable poner una piscina o un jacuzzi en un ático, se deben tener en cuenta las siguientes cuestiones:
Estructura del edificio
El peso de la piscina o el jacuzzi repleto de agua más el peso de las personas que lo utilicen ejercerá una presión considerable sobre la estructura del edificio, más de la que quizá soporta. Antes de construirla, se debe realizar un estudio estructural para determinar si el ático puede soportar esta carga adicional. En caso de que finalmente se instale, la carga debe distribuirse de manera uniforme para evitar sobrecargar ciertas áreas y causar daños.
Los edificios más antiguos suelen tener más limitaciones estructurales que los actuales, lo que puede dificultar la instalación.
Instalaciones necesarias para la piscina o el jacuzzi
Si se lleva a cabo el proyecto, es fundamental garantizar una correcta impermeabilización para evitar filtraciones que puedan dañar la estructura del edificio y las viviendas inferiores. Además, se precisa una conexión de agua adecuada para llenar y mantener la piscina o jacuzzi y una instalación eléctrica segura para el funcionamiento de los equipos de filtración, calefacción y otros elementos.
Normativa y licencias
La construcción de una piscina o un jacuzzi en un ático debe cumplir con la normativa estipulada en el Código Técnico de la Edificación (CTE). Este código establece las normas y requisitos técnicos mínimos que garantizan la seguridad, accesibilidad y eficiencia energética de los edificios.
Respecto a si hace falta o no algún tipo de licencia, habrá que solicitar un permiso de obras al ayuntamiento en el que se ubique el inmueble o, como mínimo, una declaración responsable.
Cabe destacar que en función de las dimensiones de la piscina o el jacuzzi y del ayuntamiento al que corresponda, la construcción de esta puede ser considerada como obra mayor o menor.
Te puede interesar: Cómo solicitar una licencia de obras y cuánto cuesta
Permiso de la comunidad de propietarios
Aunque la piscina esté ubicada en un ático de propiedad privada, es necesario obtener la aprobación de la comunidad de propietarios, al menos en la mayoría de situaciones. La Ley de Propiedad Horizontal establece que cualquier intervención que afecte a la estructura del edificio o a elementos comunes (como techos, fachadas, tuberías o instalaciones) tiene que ser aprobada por la comunidad de propietarios.
El peso de la misma supondrá una carga adicional que puede comprometer la estabilidad estructural del edificio. Dado que el techo o la terraza sobre la que se construye suelen ser elementos comunes o tener parte de ellos, cualquier modificación requiere el consentimiento de la comunidad.
¿Y si el jacuzzi o la piscina es prefabricada?
Las piscinas o jacuzzis portátiles o prefabricados no requieren obras y, por tanto, no habría que pedir licencia. Sin embargo, no es conveniente hacer esto a la ligera. Si el peso de la instalación supera al que soporta la estructura, podría generar todo tipo de problemas: derrumbamientos, grietas, humedades, etc. Por otro lado, puede que la comunidad de propietarios lo haya prohibido expresamente, así que conviene consultar los estatutos.
Sigue toda la información inmobiliaria y los informes más novedosos en nuestra newsletter diaria y semanal. También puedes seguir el mercado inmobiliario de lujo con nuestro boletín mensual de lujo.
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta