Cuña fiscal

España es uno de los países donde las rentas altas pagan más IRPF y cotizaciones sociales

El último estudio del Instituto de Estudios Económicos (IEE) denuncia la pérdida de competitividad de la economía doméstica en materia fiscal y la elevada presión impositiva que sufren empresas y ciudadanos. Un ejemplo de ello es que España es el cuarto país desarrolladoscon la cuña fiscal más alta, ya que el IRPF y las cotizaciones sociales suponen casi un 60% del salario nominal de los asalariados sujetos al tipo máximo, frente al 47% de media en la UE y la OCDE. Solo Portugal, Reino Unido y Finlandia tienen una cifra superior.
El IRPF y las cotizaciones sociales suponen casi el 40% del sueldo bruto en España

Los impuestos y la Seguridad Social ya se comen casi un 40% de los salarios en España

Las cotizaciones a la Seguridad Social y el IRPF, cuya suma se conoce como cuña fiscal, representan el 39,3% del sueldo bruto de los trabajadores en España, casi cinco puntos más que en la media de la OCDE y por delante de países como Reino Unido, Dinamarca, Noruega, Irlanda, EEUU, Japón o Canadá. El principal motivo de estas diferencias está en las elevadas cotizaciones que pagan las empresas españolas por sus empleados, lo que les resta competitividad, impacta de forma negativa en la generación de empleo y explica la elevada tasa de paro, según el Instituto de Estudios Económicos.
Más de la mitad de las autonomías ingresan menos por cotizaciones sociales de lo que gastan en pensiones

Más de la mitad de las autonomías ingresan menos por cotizaciones sociales de lo que gastan en pensiones

Un total de 13 CCAA no pueden sufragar el pago a los pensionistas con el dinero que ingresan por las cotizaciones sociales, entre las que se encuentran Cataluña, País Vasco, Asturias, Castilla y León o Galicia. Solo Madrid, Canarias, Baleares y Murcia tienen recursos propios suficientes como para sufragar las pensiones. El envejecimiento de la población es uno de los factores que explican este escenario.

Las cotizaciones salariales tendrían que subir para acabar con el déficit de las pensiones

El gasto en pensiones sigue siendo un gran problema para la Seguridad Social. La destrucción de 3,5 millones de empleos y la contracción de los salarios han mermado los ingresos y el Gobierno estudia alternativas para mantener la financiación. Los expertos hablan de subir tres puntos los tipos de cotización, lo que reportaría unos ingresos de 12.000 millones de euros para acabar con el agujero de las pensiones.