
Cuando valoramos una vivienda que se quiere vender, Solemos tener en cuenta elementos tangibles o visuales como los m2, la conservación del inmueble o su ubicación pero se pasan por alto otros factores que son intangibles y que pueden encarecer el precio de la vivienda entre un 15% y un 20%: la orientación de la casa, la distribución, las infraestructuras o el transporte en la zona
A la hora de poner un precio a la vivienda que se quiere vender, es importante atender al precio de mercado de la zona pero también fijarse en otros factores intangibles de valor y destacarlos de cara al comprador potencial, tal y como detalla José Antonio Granero, decano del Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM). Estos elementos intangibles son los siguientes:
1.- las infraestructuras de la zona: es importante que el barrio tenga cerca un comercio básico, como farmacia, supermercados, panaderías, etc.
2.- el transporte: una buena comunicación también da un valor añadido a la vivienda que se quiere vender, según Granero.
3.- Una distribución inteligente: si la vivienda tiene una distribución eficiente gana enteros. Hay que evitar que tenga un pasillo interminable donde se pierden m2 e intentar, por ejemplo, que la cocina sea grande.
4.- la orientación: se valora mucho la orientación de la vivienda porque de ello depende necesitar o no aire acondicionado o calefacción. Por ejemplo, a una vivienda con orientación sur le daría el sol todo el día en invierno, primavera y Otoño y en verano sólo en las horas centrales del día, cuando da más calor. Una orientación este da todo el año el sol desde el amanecer hasta el mediodía.
5.- ventilación natural: no siempre hay que usar el aire acondicionado en los meses de calor. Hay viviendas que cuentan con ventilación cruzada natural, lo que les permite a los propietarios ahorrarse dinero en electricidad de más.
6.- las vistas de la vivienda: no es lo mismo asomarte por la ventana o terraza y divisar la casa de campo o el retiro que la fachada de otro edificio. Esto puede servir como reclamo para la vivienda que se quiere vender.
7.- materiales saludables: si la casa cuenta con materiales de madera o naturales gana puntos. “Respirar elementos naturales y que el inmueble por dentro desprenda una imagen de salud es muy positivo a la hora de valorar el precio de la vivienda”, recuerda Granero.
8.- Confort acústico: otro arma que aporta valor añadido a la vivienda que se quiere vender es un buen aislamiento acústico.
9.- casa con firma: que la casa haya sido diseñada por un arquitecto solvente y de reconocido prestigio da una garantía ya que ha pensado en el confort y bienestar de la persona que va a vivir en la vivienda, según el decano del COAM.
5 Comentarios:
El precio, el precio es lo que mas se valora
Al inquilino actual de la Moncloa también lo van a deshauciar.
Si antes de la crisis el discurso de la gente era que lo que hoy se compra en 100 mañAna se va a vender en 120, desde que se instaló la crisis el discurso de la gente es que todo es caro. De forma que si alguien pidiera por su piso 10 euros la gente le pediría descuento.
No era el vendedor el que subía los precios, entonces, sino la gente que lo pagaba. Igualmente, aunque al revés, ocurre ahora.
Pero hay algo que solo la cordura puede poner en su sitio. Como en todo, el precio de los inmuebles parte de su costo de producción. Intentar conseguir las cosas por debajo de ese precio favorecerá al que lo consigue pero perjudica al fabricante y a la economía de todos. Nadie debería pretender comprar un coche por debajo del costo de fabricación, salvo que le importe un bledo el cierre de las fábricas que generan trabajo y hacen posible la economía.
Las consecuencias, que todos estamos pagando con subida de impuestos (iva, ibi, coeficientes de abatimiento, etc), con prestaciones de desempleo y con millones de personas en el paro lo que creemos ahorrarnos comprando los pisos a precios de derribo. Creemos que comprar así trae ventajas, pero hagamos cuentas de verdad.
El sector de la construcción es el gran motor de cualquier país porque pone en funcionamiento miles de fábricas con sus correspondientes puestos de trabajo directos e indirectos.
Imaginemos una empresa de 1000 trabajadores que fabrica muebles y los vende a precio de costo pero sus trabajadores compran sus muebles a la competencia arruinada porque los vende a precio de ruina. Las consecuencias pues, que la fábrica se cierra y sus trabajadores se quedan sin trabajo. ¿Entendido?
Carmen, mas o menos te iba a dar la razon en casi todo, todo hay que pagarlo a su justo precio, evidentemente, pero a lo mejor lo que tu consideras un "justo precio por las cosas" el resto lo percibe como un atraco a mano armada.
Pero en lo que estas equivicada por completo es en lo de "el sector de la construcción es el gran motor de cualquier país".
Eso, querida carmen, es una gran falacia, como lo era el "la vivienda nunca baja" que tanto daño ha hecho a este pais y tanta gente ha arruinado.
Una doctrina grabada a fuego en la burbuja inmobilaria, que nos han impuesto y es totalmente falso y que veo que sigues creyendo en ella sin razonar lo que dices. España jamas ha tenido como motor la construccion, salvo unos pocos años en la burbuja del ladrillo.
Ningun pais jamas puede tener como motor economico la construccion. Dado que la construccion no genera valor añadido, no capta divisas. Una casa es un producto de consumo, no genera rentas ni puestos de trabajo una vez acabada de construir. Un hotel, un restaurante, una fabrica, si lo hace, una vez construido. El hecho de "construir" algo, no es motor de nada, es el uso que se le de a ese "algo". Construir casas, para especular con ellas, no genera valor, especular es quitarle dinero a unos ciudadanos para darselo a otros.
Lo típico del oportunista es percibir cualquier precio por bajo que sea como un atraco a mano armada. Hoy el país está lleno de oportunistas y menesterosos, igual que hace pocos años lo estaba de avariciosos ansiosos de dar el pelotazo.
Lo cierto es que en un mercado saneado, las cosas no se venden por debajo de su precio de costo (más el beneficio lógico del que vende, distribuye, etc), por la sencilla razón de que nadie se levanta por las mañanas para entregar su trabajo gratis a otras personas, por mucho que necesiten lo que produce con su trabajo.
No nos engañemos, del festín de precios bajos se beneficiarán los inversores con capacidad de compra (fondos buitre y otras figuras similares), no el pobre-ciudadano-muerto-de-miedo, que ni siquiera tiene acceso al crédito (sobre todo si espera que le regalen un ático en Serrano). Tras la fiesta, el mercado se contraerá hasta la dimensión de los que se pueden permitir pagar: construcción + coste del suelo (incluyendo centralidad y coste de urbanización) + promoción (cobertura de riesgo + beneficio-mayor-que-invertir-en-bonos).
Por cierto:
1.- La economía es cíclica, y el ciclo empieza a cambiar cuando la mayoría piensa que "esta vez será distinto". Por mucho que les pese a los pesimistas, siempre es igual, de la misma forma que por mucho que les pesare a los optimistas, la burbuja estalló porque siempre pasa lo mismo con las burbujas.
2.- La actividad inmobiliaria no es solo "construir casas". El hotel, el restaurante, la fábrica... necesitan de la actividad inmobiliaria y la construcción. Es algo básico. De hecho, la producción de cemento es un indicador económico esclarecedor.
3.- Los bienes inmuebles no son eternos, tienen una vida útil limitada, mas corta de lo que normalmente se desea. Lo que sobra se termina arruinando, lo que sirve necesita ser rehabilitado, reconstruido y mantenido.
4.- Como dice el artículo, lo céntrico, lo luminoso, lo que tiene vistas, la primera línea de playa, lo mejor... tiene más precio porque es más escaso y queda en manos de los que lo pueden pagar.
5.- El deseo de algunos de que las cosas vayan peor para que los precios bajen es una tontería: como en Luanda, la ciudad más cara del mundo, los precios son los que son independientemente de las necesidades de la gente, y la mayoría viven en infraviviendas. Yo personalemente prefiero que las cosas empiecen a ir bien para que la gente pueda vivir (alquiler o compra), en casas dignas.
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta