A partir de cierto nivel de ingresos, la carga fiscal en el IRPF puede ser mayor en comparación con el Impuesto de Sociedades (IS)
Comentarios: 0
¿Cómo pagar menos impuestos: de autónomo o Sociedad Limitada?
Freepik

Unos siete meses de trabajo dedican los españoles a pagar impuestos, según un informe de la Fundación Civismo. El pago de los tributos es algo que repercute más notablemente en los trabajadores por cuenta propia, quienes tienen que asumir IRPF, IVA y la cuota de autónomos. Por ello, muchos se preguntan, cómo pagar menos impuestos, ¿de autónomo o sociedad limitada? 

A partir de cierto nivel de ingresos, la carga fiscal en el IRPF puede ser mayor en comparación con el Impuesto de Sociedades (IS). Para encontrar una respuesta a cómo pagar menos impuestos, si como autónomo o como Sociedad Limitada, veamos las particularidades de cada sistema tributario. 

Autónomos y el IRPF vs. Sociedades Limitadas y el IS

Para entender las diferencias fiscales entre ser autónomo o constituir una Sociedad Limitada (SL), hay que explicar los impuestos que se aplican a cada opción:

Autónomos: Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)

Los autónomos tributan por sus beneficios (ingresos menos gastos deducibles) a través del IRPF. Este impuesto funciona de la siguiente manera:

  • Pagos trimestrales: Se abona un 20% del beneficio generado al final de cada trimestre.
  • Declaración anual: Los rendimientos de la actividad se integran en la Base Imponible General del IRPF junto con otras fuentes de ingresos, como sueldos, inversiones o alquileres.
  • Impuesto progresivo: El porcentaje final a pagar depende del tramo de renta al que se llegue. Por ejemplo, si el tipo impositivo final supera el 20%, el contribuyente deberá abonar la diferencia; si es inferior, Hacienda realizará una devolución.

El IRPF sigue un sistema de tributación progresiva que considera las circunstancias personales y familiares. Los tramos impositivos del IRPF, según la base imponible, son los siguientes:

  • Hasta 12.450 €: 19%
  • De 12.451 € a 20.200 €: 24%
  • De 20.201 € a 35.200 €: 30%
  • De 35.201 € a 60.000 €: 37%
  • Más de 60.001 €: 45%

Sociedades Limitadas: Impuesto sobre Sociedades (IS)

Las SL tributan mediante el Impuesto de Sociedades, que se aplica directamente a los beneficios obtenidos. Las características principales son:

  • Tipo impositivo estándar: Se paga un 23% sobre los beneficios del año anterior, siempre que la cifra de negocio sea inferior a 1 millón de euros; en caso contrario, el tipo asciende al 25%.
  • Nuevas sociedades: Las SL de nueva creación tributan al 15% durante los dos primeros años en los que generen beneficios. Sin embargo, si una actividad previamente ejercida como autónomo se convierte en SL, no se considera una nueva sociedad.

Con estos porcentajes, la tributación al 25 % por la base imponible se alcanza en la declaración de la renta con una base imponible de 41.400 euros, en el caso de ser soltero y no tener ninguna discapacidad. A esta base imponible se le deduce el mínimo personal exento de tributación, que para este año es de 5.151 euros, lo que resulta en una base imponible efectiva de 36.250 euros.

En otras palabras, si tus rendimientos íntegros de actividades económicas superan los 41.400 euros, pagarás menos impuestos si tributas por el Impuesto de Sociedades en lugar de por el IRPF. 

Cuándo es mejor una Sociedad Limitada

Si tus rendimientos íntegros por actividades económicas superan los 41.400 euros anuales, constituir una sociedad puede permitirte optimizar tu carga fiscal. La clave está en que cuanto mayor sea la diferencia entre tus ingresos y este umbral, más beneficiosa será la tributación como sociedad.

Sin embargo, es importante considerar que retirar dinero de la sociedad conlleva otras implicaciones fiscales. Los dividendos distribuidos tributan en el IRPF al 19% (o al 18% para los primeros 6.000 euros). Además, como administrador, deberás percibir un sueldo que también estará sujeto al IRPF.

Entonces, ¿qué es mejor?

Depende. Algunos estiman que, a partir de un beneficio anual de 50.000 a 60.000 euros, puede ser más rentable constituir una sociedad que tributar como autónomo. Sin embargo, esto no siempre es así y hay que tener en cuenta otros factores.

Lo  más recomendable al iniciar una actividad empresarial es darse de alta como autónomo y aprovechar la tarifa plana de la Seguridad Social.

Ejemplo práctico

Supongamos que tus actividades económicas generan 75.000 euros anuales de beneficios. La estrategia ideal sería que la sociedad te pagara un sueldo de 41.000 euros. De este modo:

  • Los 41.000 euros tributarían en el IRPF a un tipo global inferior al 25%.
  • La sociedad pagaría impuestos por la diferencia (34.000 euros) al 25%, lo que optimiza el ahorro fiscal.

Constituir una sociedad conlleva pagar  700 euros inicialmente y exige cumplir con mayores obligaciones formales y documentales. Por ello, si tu base imponible en el IRPF es inferior a 50.000 euros, puede no resultar rentable adoptar esta estructura. Para ingresos superiores, podría serlo.

¿Y respecto al pago de la cuota de autónomos?

El pago de la cuota de autónomos varía dependiendo del tipo de autónomo y de sus ingresos. Para un autónomo societario, la base de cotización mínima es superior a la de un autónomo profesional, es decir,  la cuota mensual a pagar también será más elevada. 

Sigue toda la información inmobiliaria y los informes más novedosos en nuestra newsletter diaria y semanal. También puedes seguir el mercado inmobiliario de lujo con nuestro boletín mensual de lujo.

Ver comentarios (0) / Comentar

Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta