
Los suministros de un alquiler siempre es mejor que estén a nombre del inquilino, como ya comentamos en un artículo anterior. Pero ¿qué ocurre en aquellos casos en los que los servicios no están dados de alta en el piso? ¿Se podría alquilar el inmueble o es obligatorio que estén contratados? Resolvemos las dudas.
Lo más frecuente es que una vivienda en alquiler tenga los suministros dados de alta, al menos los esenciales: luz, agua y gas. Pero puede darse el caso de que no sea así, por ejemplo, una casa que lleve tiempo vacía. ¿Se podría alquilar esta vivienda? Sí.
¿Quién tiene la obligación de contratar los suministros en un alquiler?
Generalmente, corresponderá al propietario, es decir, al arrendador, realizar los trámites pertinentes para dar de alta los distintos suministros, pero no tiene por qué ser así. Puede pactar con el inquilino que se encargue de activar los distintos suministros; sin embargo, lo más frecuente es que estén dados de alta y el arrendatario tenga que ponerlos a su nombre.
Por tanto, sí, es posible alquilar una vivienda sin los suministros dados de alta. La Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) deja libertad de pacto para esta cuestión.
Te puede interesar:
- Cuánto cuesta dar de alta la luz, cómo hacerlo y cuánto tardan
- ¿Cuánto cuesta dar de alta el agua y qué documentos son necesarios?
Cómo cambiar la titularidad de suministros el inquilino
Para cambiar la titularidad de los suministros, es necesario e indispensable que el arrendatario (inquilino) se ponga en contacto con las compañías para realizar el trámite. Para ello, le pedirán el contrato de alquiler, una cuenta bancaria en la que domiciliar los pagos, así como algunos datos de la última factura del suministro a cambiar, por ejemplo, el CUPS. En resumen, información que certifique que a partir de la fecha será quién use legalmente el inmueble.
¿Puede cambiar la titularidad el propietario?
No podrá hacer el cambio de suministros el propietario. Esta es una cuestión a tener en cuenta y que conviene tener hecha antes de que comience el alquiler. Una vez que el inquilino entre en el piso, si no ha cambiado los suministros a su nombre, podría aprovecharse durante meses de la ineficiencia de la ley y consumirlos sin pagar hasta que le desalojen, ya que los plazos de desahucio pueden superar el año.
Según el artículo 27 de la LAU, “la falta de pago de la renta o, en su caso, de cualquiera de las cantidades cuyo pago haya asumido o corresponda al arrendatario” permite resolver el contrato.
Si los suministros están a nombre del propietario y el inquilino deja de pagar, no se podrán dar de baja porque el arrendador está obligado a mantener la vivienda habitable.
Para protegerse de posibles percances, es conveniente especificar en el contrato de alquiler que los suministros correrán a cargo del inquilino desde el inicio del arrendamiento. Además, es aconsejable firmar el contrato días o semanas antes de que se haga efectivo, así el inquilino tendrá tiempo para realizar la gestión.
¿Cuánto se tarda en cambiar los suministros?
Depende del suministro, la ubicación o la compañía, entre otros factores. Es un trámite gratuito que puede ser casi inmediato o llevar unos 15 días.
¿Cómo se distribuyen las facturas de suministros el alquiler de habitaciones?
Lo más común es dividir los gastos de suministros de manera proporcional entre todos los inquilinos que habitan en la vivienda. Sin embargo, en situaciones donde las habitaciones tienen tamaños diferentes, una alternativa más equitativa podría ser ajustar los gastos según los m2 que ocupa cada persona. Ambos métodos son válidos, aunque es esencial que exista un acuerdo reflejado en el contrato de alquiler entre los propietarios y los arrendatarios para establecer el sistema que se aplicará.
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta