Enfrentarse a una mudanza sin perder los nervios no tiene por qué ser misión imposible. La clave está en ser previsores y, ante todo, organizarse y tener en cuenta cuánto cuesta una mudanza. No importa si la casa es pequeña o grande, si vamos a realizar una parte del trabajo por nuestra cuenta o vamos a confiar en una empresa profesional, hay trucos que funcionan Poner fecha a la mudanza, deshacerse de las cosas que no son útiles, separar las cosas importantes o no embalar las cajas en el último momento son algunos de los consejos más prácticos.