El gobierno ha decidido crear la que ya se llama la "autopista mala", una sociedad donde las constructoras españolas agruparán sus activos tóxicos de autopistas para que sean compradas por el estado con dinero público.
Fomento baraja agrupar a las autopistas en apuros en una sociedad pública: el ministerio de fomento ha abierto una ronda de contactos con los accionistas de las autopistas que están en riesgo de quiebra para tratar de encontrar una solución al problema.
Recibe nuestras últimas noticias en tu correo electrónicoSuscribirse