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El Gobierno vasco quiere hacer caja con el edificio Prim. Se trata de un inmueble que data de 1905 que pertenece a la región, que lleva en desuso seis años y por el que prevé sacar 7 millones de euros con su venta a través de una subasta.

El edificio está situado está catalogado como residencial con un grado B de protección en el Plan Especial de Protección del Patrimonio Urbanístico Catalogado (Peppuc), y cayó en manos de la autonomía después del traspaso de servicios del Estado a País Vasco en materia de Cámaras de la Propiedad Urbana. 

Para el Ejecutivo vasco, mantener el edificio es un coste innecesario, de ahí la decisión de traspasarlo. La Cámara de Vitoria ya ha autotizado la venta del inmueble. 

El futuro comprador podría cambiar el uso del edificio, aunque para ello sería necesaria una modificación del Plan General de Ordenación Urbana. Además, y debido a su grado de protección de algunos elementos arquitectónicos, no se puede modificar la fachada, el portal, ni algunos elementos del interior. 

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