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El Banco de España ha lanzado un duro mensaje a toda la banca. El regulador del sector asegura que las entidades no están cumpliendo como deben el plan antidesahucios que puso en marcha el Gobierno para contrarrestar los problemas que sufren las familias más vulnerables que están a punto de perder su hogar.

Según el organismo presidido por Luis María Linde, los bancos están impidiendo que esos clientes puedan ahorrarse costes registrales y tributarios, e incluso que puedan reestructurar su deuda y conseguir unas condiciones más favorables para devolver sus préstamos.

En la Memoria de Reclamaciones de 2014 que presentó la semana pasada, el Banco de España asegura que el sector evita ofrecer soluciones alternativas a esos clientes vulnerables. El estudio no aporta ningún dato concreto, aunque el regulador asegura que ha recibido varias quejas y expone una docena de casos para ilustrar estas prácticas que considera inadmisibles.

El organismo también recuerda que la adhesión de las entidades al Código de Buenas Prácticas es voluntaria y que, una vez que un banco se acoge a él, no puede desviar su cumplimiento. En caso de desvío, se exponen a una sanción.

Entre las opciones que establece el plan antidesahucios está reestructurar la deuda siempre que la cuota no consuma más del 50% de los ingresos familiares y, de ser inviable, pueden ofrecer quitas o aceptar la dación, pudiendo el cliente quedarse en su piso con una renta social mínima.

En la Memoria, el regulador pide a la banca que sea proactiva a la hora de llevar a cabo soluciones alternativas a los desahucios, sumándose así a la postura defendida por el Defensor del Pueblo, que en primavera pidió al Banco de España que insistiera al sector para que aplicara el Código y lo hiciera a la mayor brevedad posible, para evitar que las familias más vulnerables sigan acumulando cuotas impagadas o retrasadas y comisiones.

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