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El Gobierno de Cantabria está ultimando su Plan de Vivienda, que presentará oficialmente a finales de este mes. Entre las medidas que contempla está el recuperar los pisos vacíos que existen en la región para incorporarlos al parque de alquiler público, tal y como se aprobó en el Pleno del Parlamento. Con esta iniciativa, la consejería de Vivienda espera poner al menos un centera de viviendas en régimen de alquiler con precios "asequibles".

El consejero de Vivienda y Obras Públicas, José María Mazón, señaló que de momento quieren atender a los colectivos más desfavorecidos, "en principio, queremos ser modestos y ver cómo funciona". El objetivo del Gobierno autonómico es "movilizar más vivienda privada al mercado" para dar una respuesta a los problemas que algunas familias encuentran para acceder a la vivienda, agravados por una escasa oferta y un incremento del precio del alquiler (un 7% este primer trimestre del año). 

Según datos del Instituto de Estadística (INE), en Cantabria hay 47.000 hogares desocupados, lo que significa un 13% del parque total. La mayoría se concentran en Santander, Torrelavega y Castro Urdiales. A partir de las cifras que maneja el Gobierno, también se incluyen muchas casas que son segundas residencias, por lo que recomiendan "tratar con precaución" los datos que disponen. T

ambién, hay un número elevado de casas inhabitables o abandonadas "que no se pueden considerar viviendas vacías, explicó el director general de Vivienda, Francisco Javier Gómez Blanco. En definitiva, desde la consejería advierten que ese 13% podría reducirse considerablemente. 

Asimismo, el plan trabajará incentivar la oferta y la demanda. Es decir, en el caso de la oferta, buscará fórmulas para que grandes tenedores o fondos de inversión, que disponen de pisos a raíz de ejecuciones hipotecarias, destinen viviendas al parque público. Para ello, pretenden incentivar a los propietarios con incentivos fiscales y un seguro de responsabilidad multirriesgo financiado por el Gobierno. "Se trata de darles confianza", explicó el consejero.

Respecto a la demanda, por su parte, el plan contempla deducciones fiscales para los inquilinos, sobre todo para colectivos vulnerables, que también disfrutarán de ayudas al pago del alquiler. La consejería fijará los precios y requisitos para acceder a estas ayudas, con distintos tramos escalonados en función de los ingresos.

Más medidas para potenciar el alquiler

Al margen de las viviendas vacías, Mazón explicó que esperan implantar más medidas para potenciar el alquiler, "pese a que no es una tradición demasiado arraigada" en España, lamentó. En este sentido, seguirán usando el derecho de tanteo y retracto o la compra con cesión temporal de viviendas de Sareb para seguir incrementando el parque público hasta las 280 viviendas. En 2015, disponían de 150.

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