Entre el 4 de junio y el 8 de agosto pasados, 44 trabajadores perdieron la vida en las obras de construcción de los estadios que albergarán el mundial de fútbol de 2022 en catar. Casi la mitad de las muertes se debió a fallos cardiacos provocados por el agotamiento derivado de las interminables jornadas de trabajo, que rozan el “esclavismo”, según han revelado los familiares de los fallecidos al diario británico ‘the guardian’
Además, según algunos testimonios recogidos por el diario inglés, las empresas constructoras negaban el acceso al agua a estos operarios, incluso bajo temperaturas que rozaban los 50 grados centígrados.
El resto de los decesos se debió a accidentes laborales, muy frecuentes debido a las escasas medidas de seguridad que hay en las obras, en las que se puede ver como operarios desafían a la gravedad trabajando en altura sin llevar arnés
Sólo el año pasado, más de 6.000 trabajadores extranjeros denunciaron a las autoridades locales las malas condiciones laborales. Sobre todo, se quejaron de la explotación laboral, los retrasos en los pagos, la violencia física y los excesivos riesgos
“Según la ley catarí, los empleadores tienen un control total sobre sus trabajadores. Tienen el poder incluso de decidir si pueden cambiar de empleo, dejar el país o quedarse en catar”, denuncia sharan burrow, secretaria general de la confederación sindical internacional
Y la vida lejos del andamio no mejora para los casi 1,2 millones de inmigrantes de países pobres de Asia y áfrica que trabajan en levantar los estadios, los hoteles y las carreteras necesarias para el mundial de 2022: hasta 12 trabajadores se hacinaban para dormir en cubículos que no reunían las mínimas condiciones de higiene
El compromiso de las autoridades Qataríes con la fifa implica un desembolso en infraestructuras cercano a los 100.000 millones de dólares. Entre los proyectos estrella destacan nueve estadios de última generación, un tren de alta velocidad y una carretera sobre el mar que salve los 50 kilómetros entre Qatar y Bahrein
1 Comentarios:
Desde luego el hombre no evoluciona nada, de las piramides de Egypto al estadio de quatar...que imbecil es el hombre!
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta