Las previsiones económicas penden de un delicado equilibrio, que depende en gran medida de la trayectoria de la inflación. De cara a 2024, la inflación parece estar disminuyendo, pero persiste el riesgo de una segunda ola de presiones sobre los precios impulsada por los conflictos geopolíticos en Ucrania y Palestina, pero también en el sudeste asiático, y alteraciones en la cadena de suministro en el Mar Rojo.
A todo esto se suma un mercado laboral más fuerte de lo esperado, lo que podría impulsar la demanda de los consumidores, elevando los precios. Las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para este año prevén que la inflación mundial disminuya al 5,8%, frente a un promedio anual estimado del 6,8% en 2023.
En Europa, se prevé que la inflación promedie el 3,3% en las economías avanzadas. Hoy en día, la caída de los precios del gas natural y el bajo crecimiento del PIB mantienen a raya las expectativas de inflación.
Se prevé que las políticas monetarias más estricta y la caída de los precios de la energía amortigüen las presiones sobre los precios junto con un enfriamiento del mercado laboral. Los principales riesgos vienen de un aumento de los costes debido al conflicto en Oriente Medio y el Mar Rojo, que podría seguir aumentando y los precios de la energía podrían aumentar en medio de una interrupción del suministro, lo que impulsaría la inflación.
El exceso de ahorro acumulado podría seguir impulsando las economías, lo que llevaría a los bancos centrales a seguir siendo agresivos. Un crecimiento salarial persistentemente alto, que aumentó aproximadamente el doble del promedio prepandemia en los países avanzados en 2023, podría impulsar el consumo y los precios más altos.
Aumento de los costes de la vivienda también se encuentra entre las preocupaciones de los expertos. La vivienda representa aproximadamente un tercio de la inflación, uno de los componentes más importantes, en general. Si los precios se aceleran, se presentan riesgos inflacionarios. Por ejemplo, en enero de 2024, los costes de vivienda en EEUU aumentaron un 6% anual.
Hasta ahora, la economía global ha sido resiliente, pero persisten los factores de riesgo, las proyecciones de inflación sugieren que el camino hacia una meta del 2% es lento, pero va en la dirección correcta.
Sigue toda la información inmobiliaria y los informes más novedosos en nuestra newsletter diaria y semanal. También puedes seguir el mercado inmobiliario de lujo con nuestro boletín mensual de lujo.
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta