Robert Redford, rostro inolvidable del cine estadounidense y ganador de dos premios Óscar, nos dejó el 16 de septiembre de 2025. Además de ser un actor y director de fama mundial, Redford era también un hombre profundamente vinculado a la naturaleza y a los valores de la privacidad. Las casas donde vivió Robert Redford son propiedades de gran valor y refugios donde el actor pudo cultivar sus pasiones, desde la actuación hasta su compromiso con la protección del medio ambiente.
La casa donde vivía Redford en Utah y el Sundance Resort
Robert Redford eligió Utah, estado del oeste de Estados Unidos cuya capital es Salt Lake City, como su residencia principal durante más de cuarenta años, convirtiendo una extensa finca en la montaña en un referente internacional. El Sundance Mountain Resort, fundado por el actor en los años 60, es un auténtico manifiesto de su enfoque de la vida, donde la naturaleza, el arte y la sostenibilidad se fusionan armoniosamente. Aquí, entre bosques centenarios y paisajes, Redford también creó el famoso Festival de Cine de Sundance.
Su finca se extiende a lo largo de cientos de hectáreas y, con el paso de los años, se ha convertido en un modelo de gestión sostenible, con instalaciones integradas en el paisaje y actividades dirigidas tanto a la comunidad local como a artistas emergentes. A pocos kilómetros del complejo turístico, Redford también tenía el Horse Whisper Ranch, que recientemente ha puesto a la venta.
¿Por qué se llama así el Sundance Mountain Resort?
El Sundance Resort de Robert Redford toma su nombre del personaje que lo convirtió en una leyenda de Hollywood: el "Sundance Kid", el forajido que interpretó en la famosa película "Dos hombres y un destino" de 1969, junto a Paul Newman.
Cuando Redford compró la propiedad, decidió llamarla "Sundance" en homenaje al papel que marcó su carrera. Ese nombre se convirtió luego en una marca cultural: del resort nacieron el Sundance Institute y el Sundance Film Festival, hoy en día uno de los festivales de cine independiente más importantes del mundo.
La villa de Tiburon en San Francisco: el refugio californiano
Además de su vínculo histórico con Utah, Redford también eligió California, donde nació en Santa Mónica en 1936, como otro lugar donde pasar momentos de intimidad. En 2020 compró una exclusiva villa en la península de Tiburon, a pocos kilómetros de San Francisco, confirmando una vez más su predilección por los entornos elegantes y rodeados de vegetación.
Situada al final de una carretera privada sin asfaltar, la propiedad garantiza la máxima tranquilidad y protección frente a las miradas curiosas. Redford y su esposa Sibylle Szaggars se encargaron personalmente del diseño de los exteriores, eligiendo plantas autóctonas y soluciones ecológicas para integrar la villa en el entorno natural.
En 2024, esta villa se puso a la venta por unos 4 millones de dólares, lo que supuso el final de un capítulo importante en la vida del actor.
En 2024, esta villa estuvo a la venta por unos 4 millones de dólares, lo que supuso el final de un capítulo importante en la vida del actor.
La casa en Connecticut, en la costa este
Además de sus famosas residencias en el oeste, Robert Redford también pasó parte de su vida en la costa atlántica. De hecho, el actor estuvo vinculado a una propiedad histórica en Weston, Connecticut, una vivienda típica de la región de Nueva Inglaterra.
La residencia, caracterizada por sus amplios espacios, su ambiente íntimo y su gran privacidad, representaba para Redford un refugio lejos de los focos de Hollywood. Posteriormente, la villa se puso a la venta y se cedió a nuevos propietarios, pasando a formar parte del patrimonio inmobiliario de prestigio de la zona.
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