
En el corazón de los Pirineos oscenses, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido se revela como un santuario de biodiversidad y geología, atrayendo a visitantes de todas partes. Prepárate para explorar sus rincones más emblemáticos y sumergirte en la belleza de sus paisajes. Este espacio protegido, que se convirtió en uno de los primeros parques nacionales de nuestro país, es un testimonio vivo de la conciencia ecológica y del conservacionismo en España.
Qué ver en el Parque Nacional de Ordesa
A medida que avanzas por el valle, descubrirás que cada rincón de Ordesa y Monte Perdido tiene su propia historia, su propio encanto. Los senderos te llevarán a través de bosques frondosos, praderas alpinas y miradores naturales que ofrecen vistas panorámicas inolvidables. Aquí, la naturaleza se expresa con una intensidad que raramente se encuentra en otros lugares.
- La Cascada de la Cueva es un espectáculo natural donde el agua se abre camino a través de la roca calcárea, creando un ambiente mágico que parece sacado de un cuento de hadas.
- La Cascada del Estrecho, con su estrecha caída de agua, es una muestra del poder erosivo del agua a lo largo de miles de años.
- Las Gradas de Soaso son una serie de pequeñas cascadas escalonadas que forman una estampa única en el paisaje del valle.
- Por último, el Refugio de Góriz sirve como punto de partida para muchas rutas de montaña y es un lugar emblemático para los amantes del alpinismo y el senderismo.
4 días en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
Los amantes de la naturaleza encontrarán en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido un escenario idílico para sumergirse en la aventura. Cuatro días pueden ser el tiempo perfecto para abrazar la esencia del parque, descubriendo sus secretos y dejándose sorprender por la diversidad de sus paisajes.
Día 1: conoce las joyas naturales
Comienza tu aventura en el Valle de Ordesa, donde podrás maravillarte con la Cascada de la Cueva y la Cascada del Estrecho, dos joyas naturales que te recibirán con su impresionante caída de agua. Dedica el día a recorrer los senderos que serpentean entre bosques de hayas y pinares, culminando con las vistas de las Gradas de Soaso antes de llegar a la emblemática Cola de Caballo, un espectáculo natural que no te puedes perder.
Día 2: explora el gran cañón
El segundo día es ideal para explorar el Cañón de Añisclo, una profunda garganta formada por la acción erosiva del río. Aquí, el paisaje cambia drásticamente ofreciendo perspectivas vertiginosas y rincones de una belleza sobrecogedora. No olvides visitar algunos de los miradores que te permitirán apreciar en toda su magnitud la grandeza del cañón.
Día 3: sorpréndete con el valle glaciar
El Valle de Pineta será tu destino en este tercer día. Este valle glaciar te sorprenderá con sus paredes verticales y sus extensos prados alpinos. Es un lugar perfecto para realizar rutas de senderismo que te llevarán a descubrir lagos de montaña y cascadas ocultas, un verdadero paraíso para los fotógrafos y los amantes del trekking.
Día 4: visita la Garganta de Escuaín
Para concluir tu estancia, dedica el último día a visitar la Garganta de Escuaín y los Miradores de Revilla. La Garganta de Escuaín es menos conocida pero igualmente impresionante, con sus aguas turquesas y su ambiente tranquilo. Los Miradores de Revilla ofrecen una vista panorámica del parque que te dejará sin aliento, un cierre perfecto para tu aventura en Ordesa y Monte Perdido.
Qué ver en coche en el Parque Nacional de Ordesa

En el caso de que prefieras observar la zona desde dentro del coche, también cuentas con interesantes opciones para disfrutar del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Un recorrido en coche te permitirá acceder a varios miradores estratégicamente ubicados que ofrecen vistas espectaculares sin necesidad de largas caminatas. Asegúrate de planificar tu ruta para incluir paradas en puntos clave que te permitan apreciar la magnitud y belleza del parque desde diferentes perspectivas.
Pueblos con encanto: Aínsa, Boltaña, Broto, Buesa y Monteperdido

Al visitar el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, no solo te sumergirás en un entorno natural de inigualable belleza, sino que también tendrás la oportunidad de recorrer pueblos llenos de historia y encanto.
- Aínsa, con su imponente castillo y su plaza mayor medieval, es una parada obligatoria para los amantes del patrimonio histórico.
- Boltaña te seducirá con su monasterio del siglo XVI y sus calles empedradas que invitan a pasear sin prisa.
- Broto y Buesa son enclaves ideales para disfrutar de la gastronomía local y de las tradiciones aragonesas.
- Y finalmente, Monteperdido, que da nombre al macizo que domina el parque, es un símbolo del vínculo entre la cultura y la naturaleza que define a esta región.
Rutas de senderismo para todos los gustos

El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido es un verdadero paraíso para los aficionados al senderismo. Con una amplia variedad de rutas, desde tranquilos paseos familiares hasta desafiantes ascensiones, hay un camino para cada visitante. Aquí podrás descubrir la rica flora y fauna del parque, así como sus impresionantes formaciones geológicas, mientras te adentras en un paisaje que cautiva a cada paso.
- La ruta Circular a la Cola de Caballo es una de las más populares y accesibles del parque. Partiendo del valle de Ordesa, este sendero te lleva a través de bosques y praderas hasta alcanzar la famosa cascada Cola de Caballo, regalándote vistas espectaculares durante todo el recorrido.
- El Paseo por San Nicolás de Bujaruelo es ideal para quienes buscan una experiencia más tranquila. Este camino te permite disfrutar del río Ara y sus paisajes circundantes, con la posibilidad de observar la fauna local en su hábitat natural.
- Para los más aventureros, la Ascensión al Monte Perdido representa un verdadero reto. Es una ruta exigente que recompensa a los senderistas con vistas panorámicas desde uno de los picos más altos de los Pirineos.
Visitar el Parque Nacional de Ordesa con niños

Introducir a los más pequeños en el amor por la naturaleza es una experiencia inolvidable, y el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido ofrece el escenario perfecto para ello.
- Con rutas adaptadas para familias, áreas de descanso y una biodiversidad que captura la imaginación de los niños, este parque se convierte en una aula al aire libre donde la aventura y el aprendizaje van de la mano.
- Los itinerarios más accesibles permiten que incluso los aventureros más jóvenes puedan disfrutar de las maravillas del parque, como sus cascadas, bosques y fauna, creando recuerdos que durarán toda la vida.
- Además, el Parque Nacional de Ordesa cuenta con centros de visitantes y puntos de información donde se organizan actividades educativas diseñadas especialmente para niños.
Cómo llegar al Parque Nacional de Ordesa
Planificar tu visita al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido es sencillo gracias a las múltiples opciones de transporte disponibles.
- Coche: si optas por llegar en coche, encontrarás que hay rutas, desde la A2 a la A23, bien señalizadas que te llevarán directamente a los puntos de acceso principales del parque.
- Autobús. para quienes prefieren el transporte público, existen servicios de autobús que conectan las ciudades y pueblos cercanos con las entradas al parque.
- Tren: además, la cercanía de estaciones de tren y aeropuertos hace que incluso los visitantes que llegan de más lejos puedan acceder al parque con relativa facilidad.
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta