La construcción de viviendas se frena en Reino Unido

El sector constructor británico se adapta a un nuevo escenario: menos casas y más impuestos

Las empresas del sector constructor viven en pleno freno de la actividad de obra nueva en Reino Unido y presionados en sus balances por los nuevos gravámenes del gobierno británico a las empresas (6%), a los promotores de propiedades residenciales (4%) y por la propuesta de un impuesto adicional de seguridad en la construcción para destinar 3.000 millones de libras (casi 3.500 millones de euros) en financiar la rehabilitación de hogares más desfavorecidos.