Hace unos días surgió una nueva polémica por la interpretación de las cifras del mercado laboral español; esta vez, entre el presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. El motivo no ha sido otro que el teórico descenso del nivel de desempleo en España, debido a la consideración de una parte de los antiguos contratos temporales como fijos discontinuos y, por tanto, como no parados, aunque realmente no estén trabajando. El profesor de economía y finanzas Miguel Córdoba señala que con la reforma de la reforma laboral muchos trabajadores (unos 200.000) que eran contratados con contratos de lunes a viernes y luego se les despedía para volverlos a contratar el lunes siguiente, han pasado de temporales a fijos discontinuos. El experto analiza con datos esta disparidad de pareceres.