
La isla Hamilton forma parte de las 74 que conforman el Archipiélago Whitsunday, en la Gran Barrera de Coral de Australia. Un paraíso donde la familia Oatley, una de las más ricas del país, ha desarrollado un resort de lujo con campos de golf y club náutico. Después de comprar la isla en 2003 por unos 200 millones de dólares, y ampliar todo el complejo, ahora pretenden venderlo por 1.000 millones de dólares, unos 930 millones de euros al cambio actual.
Los propietarios confirmaron que están explorando “oportunidades de crecimiento” en medio de conversaciones con varios fondos y sociedades. La isla se encuentra aproximadamente a 887 km al norte de Brisbane, la mayor ciudad del territorio de Queensland.
En los años 80, se levantó el primer complejo de alojamientos, un puerto deportivo, un campo de golf profesional de 18 hoyos y el aeropuerto internacional, el único de todo el archipiélago. En 2003, la isla Hamilton pasó a manos de la familia Oatley, que hizo su fortuna en la industria vitivinícola, por unos 200 millones de dólares de la época.

Desde entonces, sus nuevos dueños han invertido en la mejora de sus instalaciones. Según las cuentas publicadas se trata de 450 millones de dólares, que incluyen 100 millones de inversión en un nuevo resort de lujo, otros 85 millones en el club náutico o 45 millones en el Hamilton Island Golf Club.
Según los medios locales, la familia Oatley ha contratado al banco de inversión UBS para revisar las opciones para la isla y ya habría recibido la visita de posibles inversores.
Y es que la mayoría de las islas del Archipiélago Whitsunday son islas privadas, donde sus dueños se reparten entre las fortunas y fondos de inversión extranjeros. De hecho, Hamilton no es la única isla en venta: South Molle Island está actualmente en el mercado con un precio inicial de 25 millones de dólares.

Por desgracia, las instalaciones de la isla cayeron bajo os estragos del ciclón Debbie en 2007 y sigue cerrada. Actualmente, pertenece a China Capital Investment Group (CCIG), con sede en Shanghái.
Y no es la única isla propiedad de CCIG, Daydream Island estuvo en el mercado en 2021 por 150 millones de dólares. En 2015, adquirió esta propiedad por ‘apenas’ 30 millones, aunque ha invertido más de 100 millones en mejoras.
Hayman Island, propiedad de la multinacional malaya Mulpha, también está en el mercado con un precio inicial de 300 millones de dólares, unos 280 millones de euros.
A lo largo de la última década también se han cerrado otras operaciones como Lindeman Island a una familia de Singapur, Hook Island o Long Island a inversores australianos como Dunk Island o Lizard Island, todas ellas con intención de abrir nuevos complejos hoteleros de lujo.
Sigue toda la información inmobiliaria y los informes más novedosos en nuestra newsletter diaria y semanal. También puedes seguir el mercado inmobiliario de lujo con nuestro boletín mensual de lujo.
Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta