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El Grupo Catalana Occidente ha traspasado un edificio situado en la Plaza de la Independencia de Madrid, frente a la mítica Puerta de Alcalá y con vistas al parque del Retiro, por un importe de 25,57 millones de euros.

El inmueble, de uso residencial, posee unos 4.200 m2 de superficie y su nuevo dueño es un inversor particular del que se desconoce la identidad. 

A pesar de que está ubicado en una de las mejores zonas de la capital, el grupo asegurador ha decidido traspasar el inmueble al no considerarle un activo estratégico. Y es que en los últimos tiempos, Catalana Occidente ha puesto el ojo en el mercado de las oficinas.  

A finales de 2015, por ejemplo, compró a la firma Standard Life Investments un edificio situado en el número 55 del Paseo de la Castellana de Madrid por unos 60 millones de euros, un inmueble que posee más de 5.600 m2 repartidos en siete plantas. Apenas medio año después, adquirió un edificio de oficinas en el distrito 22@ de Barcelona, con casi 4.000 m2 de superficie y con General Electric como inquilino. 

Durante el año pasado también compró el complejo de oficinas Luxa, también en el distrito 22@ de la Ciudad Condal, por unos 90 millones de euros, así como La Llave de Oro por otros 21 millones, ubicado en la calle Pere IV de la capital catalana. Además de la compra de activos, el grupo se está volcando en la rehabilitación de activos: un buen ejemplo de ello son los 30 millones que destinó a reformar su sede histórica en el paseo de Gràcia en Barcelona. 

Actualmente, el patrimonio inmobiliario del grupo tiene un valor de mercado de casi 1.200 millones de euros. 

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