Los activos gestionados en España se incrementaron un 2,4% en el segundo trimestre de 2024, lo que equivale a 18.926 millones de euros, hasta situarse en una cifra global de 804.172 millones de euros, según los datos de Inverco. Unos activos que reflejan la suma de los distintos instrumentos de inversión colectiva y fondos de pensiones de bancos y gestoras nacionales e internacionales.
Los principales bancos españoles han logrado reducir la factura inmobiliaria en 12.000 millones de euros, gracias a las ventas de activos y la menor entrada de créditos morosos. En concreto, Banco Santander, BBVA, Caixabank, Popular, Sabadell y Bankia bajaron en 2016 la carga en 11.758 millones.
El banco Popular sigue centrado en limpiar su balance del ladrillo y los activos inmobiliarios problemáticos.
Popular está ultimando la puesta en marcha de una inmobiliaria para sacar de su balance al menos 4.000 millones en suelo, inmuebles terminados y edificios en construcción. El banco espera tener la aprobación de los reguladores en otoño y tener lista la compañía de cara a finales de año para que Deutsche Bank busque inversores en el mercado. Será una sociedad ajena la entidad, tendrá un equipo gestor profesional e independiente y se convertirá en la inmobiliaria más importante del país por detrás de Colonial y de la sociedad fruto de la fusión entre Metrovacesa y Merlin Properties.
El regulador del sector financiero español ha suavizado los criterios de provisiones que deben aplicar las entidades por los activos inmobiliarios que tienen en cartera para facilitar su venta.
La banca española acumula ya 184.000 millones de euros en activos problemáticos ligados al sector del ladrillo, según ha reconocido el banco de España.
El gabinete de estudios económicos axesor hace un repaso de la situación del sector inmobiliario y concluye que para que la demanda de vivienda se recupere es necesaria una mayor caída de precios y que se mantengan bajos los tipos de interés.
Recibe nuestras últimas noticias en tu correo electrónico Suscribirse