Comentarios: 0
Viviendas EEUU
GTRES

El mercado inmobiliario parece haberse vuelto loco en Estados Unidos en los últimos meses, con unos intereses en las hipotecas que no bajan a pesar de las predicciones de los expertos. No obstante, aunque esas elevadas tasas podrían presagiar una bajada en la demanda de vivienda que conllevaría un descenso en sus precios, estos no dejan de elevarse y el mercado no se enfría, algo a lo que Realtor.com ha tratado de buscar explicación.

En medio de un enorme problema de stock de viviendas que ha hecho que lugares como Austin o Miami eleven sus precios, la mayoría de la población que no puede permitirse adquirir una vivienda en estas zonas se está trasladando a lugares históricamente más económicos, que están empezando a elevar sus precios por la misma causa.

Es importante señalar que cuando los tipos son elevados es porque la Reserva Federal está tratando de controlar la inflación. En consecuencia, una economía sana hace que más población pueda hacerse cargo de los gastos que implican adquirir una nueva vivienda, ha señalado Laurie Goodman, miembro del Urban Institute.

De esta manera, no baja el precio de las viviendas, sino el stock, algo que en Estados Unidos ya ha alcanzado un 16,6% de bajada en julio frente a datos de 2022. Además, los tipos hipotecarios se encuentran también más elevados a causa de los inversores y las decisiones de la Fed, que han llevado a que alcancen una media del 7,19% a tipo fijo a 30 años, según datos de Freddie Mac.

La incertidumbre con respecto a futuras decisiones de la Reserva Federal y sobre la economía en general está ayudando a que estos intereses, que podrían ser más bajos, se eleven. Por su parte, los inversores están preocupados por una posible nueva subida de tipos de la Fed, que se traduciría también en un incremento mayor de las tasas hipotecarias. De esta forma, los inversores buscan compensar los préstamos de duración más corta que buscarán ser refinanciados cuando los tipos vuelvan a bajar.

Buena muestra de ello fue la decisión tomada tras el anuncio de la Reserva Federal de que posiblemente los tipos volverían a subirse hasta finales de año, tras lo que los costes hipotecarios ascendieron a un 7,47%, como ha señalado Mortgage News Daily.

La nueva construcción es más económica

Tras la predicción de varios expertos inmobiliarios de que este año se pondrían más viviendas a la venta, algo que finalmente no ha sucedido, los inmuebles de nueva construcción han tenido especial éxito al rebajar los tipos hasta el 5%, ya sea temporalmente o durante todo el préstamo a tipo fijo a 30 años.

Esto ha provocado que las viviendas nuevas, que suelen ser más caras que las ya existentes, hayan disminuido su diferencia de precio con estas últimas. En su conjunto, estos factores pueden generar que adquirir una vivienda de nueva construcción resulte más económico que hacerlo con una ya construida con anterioridad. Así, el mayor stock en los inmuebles nuevos no hace sino acrecentar la búsqueda y demanda de estos por parte de los compradores.

Ver comentarios (0) / Comentar

Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta