La recta final de año acelera lel cierre de operaciones inmobiliarias. Y este año las socimis están jugando un papel muy destacado.
Hispania ha protagonizado la última transacción, en la que ha conseguido imponerse a un coloso de la talla de Blackstone. Así, la sociedad de inversión gestionada por Azora ha comprado la cadena Alua Hotels y sus siete resorts en Canarias y Baleares, que hasta ahora han estado en manos del fondo de capital riesgo Alchemy. La operación se ha cerrado por 165 millones de euros y permitirá que la cadena siga operando estos establecimientos en régimen de alquiler.
En total, los resorts suman 1.700 habitaciones y elevan el portfolio actual de Hispania hasta las 13.000, lo que le convierten en el mayor propietario de hoteles del país. De hecho, es el sector estratégico para la socimi, que desde principios de año está llevando a cabo un proceso de desinversión en otros activos de su cartera, principalmente pisos y oficinas, para centrarse en los hoteles.
No obstante, la compañía se ha encontrado con algunos contratiempos. La crisis política en Cataluña frenó una megaoperación: la venta de de una cartera de oficinas al fondo Swiss Life por unos 500 millones de euros.
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